Las escaleras de interior nos ayudan a conectar las plantas de una vivienda. Mas allá de satisfacer este aspecto práctico, sin embargo, se convierten también un importante activo para aportar personalidad y estilo a una vivienda. Y es que las escaleras de interior ocupan un gran volumen y pueden llegar a convertirse en protagonistas de un determinado espacio si así lo queremos.
¿Qué estilo quieres para tu vivienda? Independientemente de tu respuesta no te resultará difícil encontrar unas escaleras que te ayuden a potenciarlo. Y es que existen muchos tipos de escaleras de interior y muy diferentes en cuanto a su diseño. Y en este nos detenemos hoy, mostrándoos diferentes propuestas para cada estilo.
Clásicas
Las escaleras de madera en tonos medios u oscuros con barandillas trabajadas se han comportado como punto central de las viviendas durante décadas y seguirán haciéndolo. Sus formas generalmente redondeadas seguirán trasladándonos años atrás aunque actualmente lo hagan renovadas con colores mas claros y barandillas mas discretas.
Pero no son las escaleras de madera las únicas capaces de aportar esa estética clásica a un salón. Las fabricadas piedra o mármol con barandillas metálicas de color negro también lo hacen, eso si aportando un extra de sofisticación. Y es que estas escaleras interiores siguen siendo las favoritas para convertirse en el elemento central de recibidores y salones de casas palaciegas y viviendas de lujo.
Industriales
Los loft neoyorkinos llevaron el estilo industrial a otro nivel y desde entonces son muchos los que buscan incorporar elementos de estilo industrial a su vivienda. Las escaleras metálicas son una gran alternativa para ello, convirtiéndose tanto las chapas de metal envejecidas como las rejillas metálica en un estupendo aliado para su diseño.
La rejilla metálica es hoy por hoy el recurso mas popular en aquellas viviendas que deciden apostar por una escalera de diseño industrial. Y aunque se apuesta generalmente por una rejilla negra para tal fin cada vez es mas frecuente atreverse con blancos, azules, amarillos o rosas. El punto fuerte de esta alternativa es que resulta visualmente ligera y permite el paso de la luz de uno a otro lado, convirtiéndose en un gran aliado en aquellos espacios en los que la luz natural solo llega de uno de los lados.
El hormigón es otro material estrechamente relacionado con el estilo industrial. Este aporta una gran «solidez» a las escaleras, por lo que a menudo encontrarnos escalones en este material combinados con barandillas metálicas muy ligeras. Este tipo de escaleras lucen especialmente bien en ambientes rústicos y contemporáneos a los que elementos de madera se encargan de aportar calidez.
Minimalistas
Si buscamos un estilo minimalista las escaleras flotantes siempre son una opción a contemplar. Los peldaños de estas escaleras se soportan, generalmente, en uno de sus lados proporcionando una sensación de ingravidez visualmente muy atractiva que conviene no romper con una mala elección de la barandilla.
No son la única alternativa para conectar espacios minimalistas y de vanguardia y tampoco la mas segura si tenemos niños o personas con dificultades de movilidad en casa. Siempre que apostemos por líneas limpias y colores que integren la escalera en la habitación lograremos una estética acorde con este estilo.
Modernas, contemporáneas
Muchos de los diseños de los que hemos hablado hasta el momento podrían encajar también en esta calificación. Y es que en esta tienen cabida escaleras muy diferente que destacan por sus formas, concepto o color. Escaleras de interior que decoran espacios modernos, contemporáneos y vanguardistas y que raramente pasan desapercibidas.
¿Qué tienen en común estas escaleras? La mayoría de ellas combinan diferentes materiales en su diseño: madera y metal, madera y cristal, piedra y hormigón… Siendo escaleras que bien se integran en el ambiente o rompen con este destacando sobre el resto de elementos y convirtiéndose en centro de atención.
Las escaleras de interior juegan un papel muy importante n la decoración de la vivienda. Son uno de los primeros elementos que llaman la atención y se convierten en un gran aliado para potenciar la personalidad y el estilo de nuestra casa.