El cuidado de la piel es muy importante, pues si lo realizamos bien podremos mantener nuestra dermis en buen estado y sin arrugas durante más tiempo. En ocasiones cometemos errores muy grandes con nuestra piel sin casi darnos cuenta que harán que envejezca antes.
Vamos a repasar los mayores errores que cometemos sin saberlo con nuestra piel. Si tenemos cuidado a la hora de realizar las rutinas diarias, conseguiremos tener una piel mucho más joven y cuidada.
Protección solar solo de vez en cuando
Este es un error muy común, ya que pensamos que la protección solar solamente es importante durante la temporada de verano. Pero los rayos solares pueden dañar nuestra piel en invierno e incluso en los días nublados. Como es difícil acordarse de usar un protector solar, la mejor solución pasa por comprar una crema hidratante que tenga protección solar. Hoy en día casi todas las cremas hidratantes de día cuentan con este detalle. En verano siempre se recomienda el factor 50, pues el sol puede hacernos más daño.
No retirar el maquillaje
Este parece un error muy común, ya que todo el mundo ha llegado a casa sin ganas de desmaquillarse. Pero esto es un gran error, ya que el maquillaje agranda los poros, reseca la piel y hace que esta no pueda regenerarse durante la noche. Por la noche es cuando nuestra dermis aprovecha para regenerarse y recuperarse de los daños sufridos durante el día, por lo que es el momento ideal para añadir cuidados extra. Es imprescindible desmaquillarse limpiador y tónico para conseguir una piel limpia e hidratada.
No usar la crema adecuada
En ocasiones compramos alguna crema por simple moda o seguimos con la misma siempre. Pero esto es un error, puesto que nuestra piel va cambiando de necesidades. Lo primero es buscar una crema adecuada al tipo de piel, ya sea delicada, seca, mixta o grasa. Después debemos comprar una crema que sea buena para la etapa en la que estamos, para una piel joven o madura, pues llevan componentes muy diferentes. Elegir una crema que no sea adecuada puede hacer que nuestra piel sufra las consecuencias. Realizarse un análisis dermocosmético también puede ser una buena idea, pues nos dicen cuáles son las necesidades de nuestra piel.
No usar contorno de ojos
La zona del contorno de ojos es muy delicada, pues es una piel mucho más fina, que no cuenta con tantas glándulas sebáceas. Es por eso que es uno de los primeros lugares en los que se pueden ver las arrugas. Hay que utilizar una crema de contorno de ojos incluso desde antes de los treinta años para evitar problemas posteriores. En el caso de los cuidados de la piel siempre es mejor prevenir que intentar acabar con las arrugas que ya han salido.
No hidratar la piel a diario
La piel necesita estar bien hidratada para evitar las arrugas, incluso si se trata de una piel mixta o grasa. Aunque este tipo de pieles tienen menos problemas de arrugas, también es cierto que necesitan hidratación. Las cremas para pieles no grasas no suelen contener aceites, pero sí elementos hidratantes.
No exfoliar la piel
Si queremos tener una piel luminosa e hidratada, es importante exfoliar la piel de vez en cuando. Al exfoliarla retiramos las pieles muertas y mejoramos la dermis, que se puede regenerar mucho mejor durante la noche. Hay que comprar siempre un exfoliante suave específico para la zona del rostro, que es más delicada, y dar un masaje suave para retirar las pieles muertas. En el caso de las pieles sensibles es importante exfoliar poco o con un exfoliante muy suave, pues pueden producirse irritaciones.