¿Habéis probado a incorporar legumbres en vuestras ensaladas? Las ensaladas de legumbre son una excelente manera de disfrutar de comidas ligeras, pero nutritivas, especialmente en los meses más cálidos. Hoy os proponemos una receta de ensalada de garbanzos con boniato, brócoli y mozzarella que une sabores dulces, crujientes y cremosos en un solo plato. Es ideal tanto para un almuerzo rápido como para una cena ligera.
Una de las características más destacables de esta ensalada es la combinación de ingredientes frescos y cocinados. El resultado es un contraste de sabores y texturas que la hace muy apetecible. Además, es una receta versátil, por lo que podéis adaptarla con otros ingredientes que tengáis en casa, como frutos secos, frutas frescas o diferentes tipos de quesos.
Beneficios de esta ensalada
Incluir platos como esta ensalada en vuestra dieta tiene numerosos beneficios. Los garbanzos son una fuente excelente de proteína vegetal y fibra, lo que ayuda a mantener una buena salud digestiva y a sentirnos saciados durante más tiempo. Por su parte, el boniato es rico en vitamina A y antioxidantes, mientras que el brócoli aporta vitamina C, calcio y otros nutrientes esenciales. La mozzarella, además de ser deliciosa, proporciona proteínas y calcio.
Ingredientes para 4 personas
- 1 bote de garbanzos cocidos (400g)
- 1 boniato mediano
- 1/2 brócoli (aproximadamente 250g)
- 12 tomates cherry, partidos por la mitad
- 1/2 cebolla roja, picada fina
- 6 dátiles, picados
- 200g de mozzarella en dados
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de vinagre de manzana
- 1 cucharadita de miel
- Sal y pimienta negra al gusto
Elaboración paso a paso
- Asar el boniato: Precalienta el horno a 200ºC. Pela y corta el boniato en cubos de unos 2 cm. Colócalos en una bandeja, añade un poco de aceite y ásalos durante unos 20 minutos o hasta que estén dorados y tiernos.
- Preparar el brócoli: Divide el brócoli en floretes y escáldalos en agua hirviendo con sal durante 2 minutos para mantener su color y textura crujiente. Escúrrelos y enfríalos bajo agua corriente.
- Preparar los ingredientes: Lava los garbanzos cocidos en agua fría, escurre bien y colócalos en un bol grande. Añade el brócoli, los tomates cherry, la cebolla roja, los dátiles picados y los dados de mozzarella.
- Mezclar: Incorpora el boniato asado al bol con el resto de ingredientes. Revuelve ligeramente para combinar los ingredientes.
- Preparar el aliño: En un recipiente pequeño, mezcla el aceite de oliva, el vinagre, la miel, una pizca de sal y pimienta. Bate bien hasta que emulsionen. Vierte el aliño sobre la ensalada y mezcla para que los sabores se distribuyan uniformemente.
Consejos y variaciones
- Para un toque extra de textura, puedes añadir frutos secos tostados como nueces, almendras o avellanas.
- Si buscas una opción sin lácteos, sustituye la mozzarella por dados de aguacate bien maduros.
- Integra especias como pimentón dulce, comino o cúrcuma al aliño para potenciar los sabores.
- Acompaña la ensalada con pan integral o tostadas para una comida más completa.
Esta ensalada es una opción refrescante y saludable que no requiere demasiado tiempo de preparación. Además, al ser tan versátil, puedes personalizarla según tus gustos o ingredientes disponibles. Siempre es una excelente idea incluir más legumbres y verduras en nuestra dieta diaria para favorecer una alimentación equilibrada y variada.