Receta detallada de ensalada con salmón ahumado y calabacín

  • Receta rápida, saludable y llena de nutrientes.
  • Combinación perfecta de sabores frescos y texturas variadas.
  • Incluye consejos para personalizar el plato según tus gustos.
  • Con un toque templado del calabacín a la plancha que enriquece el plato.

Ensalada con salmón ahumado y calabacín

Las ensaladas son una opción versátil, saludable y deliciosa para cualquier momento del día. Hoy te proponemos una receta única que no solo es fácil de preparar, sino que también resulta perfecta como entrante o cena ligera. Se trata de una ensalada con salmón ahumado y calabacín, una mezcla de sabores frescos y texturas que deleitarán a cualquier paladar.

Esta receta combina ingredientes cuidadosamente seleccionados que aportan frescura y un toque templado gracias al calabacín a la plancha. Además, el uso del salmón ahumado y los arándanos añade un contraste de sabores que destacarás en cualquier reunión o comida familiar. En tan solo 15 minutos podrás disfrutar de este plato saludable y lleno de nutrientes.

Beneficios de los ingredientes principales

El salmón ahumado es una fuente rica en ácidos grasos omega-3, que contribuyen a la salud cardiovascular y al buen funcionamiento cerebral. Además, contiene proteínas de alta calidad y una generosa cantidad de vitaminas como la B12 y minerales esenciales como el selenio.

Ensalada con salmón ahumado y calabacín

El calabacín, por su parte, es bajo en calorías y alto en agua, lo que lo convierte en un excelente aliado para mantenernos hidratados. Es rico en antioxidantes como la vitamina C y betacarotenos, que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y prevenir el envejecimiento prematuro.

Los arándanos, aunque pequeños, son potentes antioxidantes naturales que contribuyen a reducir el estrés oxidativo y apoyan la salud del cerebro y el corazón. Los canónigos y la rúcula añaden vitaminas, minerales y un toque ligeramente amargo que equilibra el plato.

Ingredientes para preparar la ensalada

  • 2 puñados de canónigos
  • 1 puñado de rúcula
  • 2 lonchas de salmón ahumado
  • Un puñado de arándanos
  • 20 rodajas de calabacín finitas
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta negra
  • Opcional: nueces o piñones para un toque crujiente

Paso a paso para una ensalada perfecta

La preparación de esta ensalada es sencilla y rápida, ideal para aquellos días en los que no tienes mucho tiempo pero quieres disfrutar de un plato saludable y sabroso.

  1. Preparar la base: Coloca los canónigos y la rúcula en una ensaladera amplia. Aliña con un chorrito de aceite de oliva virgen extra, asegurándote de que las hojas verdes estén bien impregnadas.
  2. Añadir el salmón y los arándanos: Trocea las lonchas de salmón ahumado en tiras o cuadrados pequeños y distribúyelos sobre las hojas verdes. Añade los arándanos para dar un toque dulce y decorativo.
  3. Detalle del salmón y calabacín

  4. Cocinar el calabacín: Unta una plancha o sartén antiadherente con unas gotas de aceite de oliva. Cocina las rodajas finas de calabacín a fuego medio, espolvoreando un poco de pimienta negra al gusto. Dóralas ligeramente por ambos lados.
  5. Incorporar el calabacín: Añade la mitad de las rodajas de calabacín a la ensaladera y mezcla delicadamente. Reserva el resto para usar como decoración final.
  6. Decorar y servir: Distribuye las rodajas restantes de calabacín por encima y, si lo deseas, añade un puñado de nueces o piñones para dar un toque crujiente. Sirve la ensalada inmediatamente para disfrutar del contraste de temperaturas y texturas.
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Consejos adicionales y variantes de la receta

Si quieres personalizar esta receta, aquí tienes algunas sugerencias que te ayudarán a adaptarla a tus gustos o necesidades:

  • Marinado extra para el calabacín: Si dispones de tiempo, puedes marinar las rodajas de calabacín con una mezcla de aceite, zumo de limón, sal y una pizca de azúcar. Esto potenciará su sabor antes de pasarlo por la plancha.
  • Sustitutos opcionales: Cambia los arándanos por granada o mango para un toque más exótico. Si no tienes salmón ahumado, el salmón fresco marinado también funciona maravillosamente.
  • Aliños personalizados: Añade un poco de mostaza Dijon o miel al aliño para conseguir un sabor más intenso. Si prefieres un toque ácido, un chorrito de vinagre balsámico será perfecto.
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Esta ensalada no solo es un deleite para el gusto, sino también un aporte importante de nutrientes esenciales. Es ideal para cualquier ocasión, ya sea como plato principal ligero o como acompañamiento en una comida más elaborada. No dudes en probarla y sorprender a tu familia con esta mezcla deliciosa.


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