Hay una creencia popular totalmente errónea de que coger al bebé en los brazos, es una manera de mal acostumbrarlo o de mal criarlo. Sin embargo hay que indicar que los brazos de los padres son necesarios en la vida diaria del bebé, al igual que ocurre con la alimentación o con el dormir. No pasa absolutamente nada por coger en brazos cuando el bebé lo necesite.
En el siguiente artículo te hablamos de la crianza en brazos, de los beneficios que tiene dichos abrazos y la importancia que tiene para el desarrollo óptimo del bebé.
La crianza en brazos
Una de las primeras cosas que compran los padres antes de que nazca su hijo es el carrito de paseo. La sociedad ha provocado que los padres no conciban la vida sin tener un carrito con el que poder pasear junto a su bebé. Sin embargo hay que indicar, que en el pasado nadie usaba el carrito a la hora de pasear el bebé. En este caso los padres se valían de los brazos a la hora de transportar a sus hijos.
Aunque mucha gente lo desconozca, son muchos los beneficios los que tiene la crianza en brazos. Este tipo de crianza ayuda a fortalecer el vínculo entre los padres y el bebé, además de mejorar el desarrollo cerebral del pequeño. Además de esto, los brazos de los padres ayudan a que el bebé se relaje y se calme. Por todos estos motivos no está de más el llevar a la práctica una crianza en brazos.
Un buen abrazo por parte de los padres debería estar presente de manera constante en la educación de los hijos. Da igual que el hijo sea pequeño o ya tenga una edad considerable como es el caso de un adolescente. No hay nada mejor que un buen abrazo para transmitir todo el amor y el afecto a los hijos. Por desgracia en la sociedad actual, los abrazos no se practican sobre todo cuando el hijo es más mayor.
Cómo llevar a la práctica la crianza en brazos
Es importante que los padres sepan que los brazos es una necesidad básica para los hijos. Los expertos en el tema aconsejan que los padres cojan a sus hijos en brazos desde que son bebés. A partir de aquí pueden usar el carrito como un complemento en relación a la educación de los hijos. Hay que dejar de lado la creencia de que llevar al bebé en brazos es malo y que lo malcría.
La crianza de brazos no solo es coger al bebé cuando lo necesite o lo desee, es también el poder hacer piel con piel para unir vínculo o dormir a su lado para que se tranquilicen y puedan conciliar el sueño de la mejor manera posible.
Criar o educar en brazos también consiste en abrazar varias veces al día a los hijos y hacerles ver que los brazos de los padres siempre van a estar presente para cuando ellos los necesiten. No está de más el dar un fuerte abrazo a un hijo para mostrar el amor y el afecto que existe en el núcleo familiar. Las muestras de amor entre padres e hijos son claves y esenciales para un correcta crianza.
En definitiva, aunque a día de hoy una gran parte de la sociedad pueda pensar todo lo contrario, no pasa absolutamente nada por arropar en los brazos a los hijos. Un buen abrazo por parte de los padres es esencial a la hora de que el bebé se sienta seguro y se relaje o tranquilice completamente. Si el bebé necesita los brazos de sus padres no pasa nada por hacerlo y poder complacer al pequeño. La crianza en brazos es una manera maravillosa de educar a los hijos y de aportar unas maravillosas muestras de amor, que ayude a fortalecer el vínculo creado además de ser bueno para el desarrollo del pequeño.