No es raro el ver a parejas dormir en camas o dormitorios separados, con el fin de poder conciliar el sueño de la mejor manera posible. Este hecho es conocido como divorcio de dormitorio. El seguir dicha práctica no significa que la relación no funcione o que vaya mal.
Se trata de conseguir que ambas personas sean capaces de descansar de una manera satisfactoria, aunque ello suponga el dormir en solitario.
Cuándo es conveniente practicar el divorcio de dormitorio
El poder conciliar el sueño y dormir las horas convenientes es clave para la salud de cualquier persona. Es por ello que si dormir junto a la pareja, supone algún tipo de problema a la hora de descansar, cualquier solución es válida. Con el paso del tiempo la dificultad o los problemas a la hora de dormir, pueden dar lugar a peleas y conflictos que pongan en serio peligro la continuidad de la pareja. El divorcio de dormitorio es por tanto una buena solución a la hora de evitar futuros conflictos y conseguir que la persona pueda dormir plácidamente.
Ventajas del divorcio de dormitorio
La principal ventaja de esta práctica es sin lugar a dudas el descanso de la pareja. A parte de ello, existen otra serie de beneficios que te enumeramos en seguida:
- Dormir las horas adecuadas y descansar de una manera adecuada, es clave para gozar de una buena calidad de vida y prevenir futuras enfermedades.
- También ayuda a que la persona pueda recuperar toda la energía para poder rendir perfectamente al día siguiente.
- Dormir separados puede ayudar a fortalecer el vínculo entre ambas personas y reducir los posibles conflictos o peleas.
- Desaparecen los posibles reproches, que puedan surgir a raíz de no poder descansar bien a causa de la pareja. Se pasa por tanto de una dinámica negativa a otra positiva con lo bueno que ello es para el buen devenir de la pareja.
Desventajas de practicar el divorcio de dormitorio
No todo van a ser ventajas y es que hay parejas que no ven nada positivo en dormir en estancias separadas:
- Dicha práctica debe ser algo en todo momento consensuado. Si una de las partes opta por dormir solo, es muy posible que la pareja se enfade y se sienta rechazado.
- El no dormir con la pareja provoca que no exista momentos de afecto ni de complicidad entre ambas personas.
- La vida sexual de la pareja puede verse afectada de una manera negativa. Hay personas que escogen el momento de irse a la cama para poder practicar relaciones sexuales con la pareja.
En definitiva, el divorcio de dormitorio puede ser una magnífica opción a pesar de lo que puedan pensar muchas personas. Dormir en pareja no es algo obligatorio que siempre se debe hacer. Si hay elementos o aspectos que provocan que una de las partes de la pareja no pueda dormir correctamente, hay que buscar una solución. Lo que si debe quedar claro es que dicha práctica debe ser algo en el que las dos partes estén de acuerdo.
A partir de aquí, el dormir separados puede ser la solución ideal y más adecuada para ambos, sobretodo a a la hora de poder conciliar el sueño de una manera plácida.