El reposapiés es una pieza en desuso que, sin embargo, contribuye a nuestro bienestar, a nuestro confort. Quienes trabajamos desde casa los utilizamos para corregir nuestra postura mientras trabajamos en el ordenador. Pero no será de estos reposapiés de los que hablaremos hoy, sino de aquellos que nos ayudan a descansar las piernas cuando nos relajamos en nuestro dormitorio o salón.
Los reposapiés se convierten en un gran aliado en los momentos de descanso. Debidamente utilizados nos ayudan a descansar las piernas y favorecer nuestra circulación. Es importante, sin embargo, escoger uno con la altura adecuada y antideslizante para evitar problemas
Si nunca he usado un reposapiés, ¿por que hacerlo ahora? Te estarás preguntando. Hay personas para las que un reposapiés puede resultar beneficioso; personas que han sufrido una lesión concreta, tienen varices o problemas de circulación. Pero no es necesaria una excusa para querer ofrecer un descanso a las extremidades. ¿A quien no le gusta estirar un rato las piernas mientras…
- Disfruta de una película en la televisión?
- Lee su libro favorito?
- O simplemente se sienta a descansar 10 minutos al llegar a casa?
Cómo elegir reposapiés
Los reposapiés no te ayudarán a aliviar las pies cansadas si no cumple una serie de condiciones. La mas importante es, sin duda, cuidar su altura para que no tengamos que formar la posición de las piernas. Nunca debe ser mas alto que un sofá, ¡nunca!
Debemos exigirle también un apoyo debidamente mullido o acolchado. Especialmente importante es disfrutar de este acolchado allí donde hace el juego nuestra rodilla y apoyan nuestras talones. Además, si el reposapiés cierta inclinación, como los modelos Omtänksam y Poang de Ikea, nos ayudará a favorecer la circulación.
El estilo
Combinar sofá y reposapiés aporta sobriedad y elegancia a nuestro salón. Cualidades ambas que podemos potenciar escogiendo un conjunto de sofá y reposapiés de líneas limpias y colores suaves que respondan a una de las tendencias de decoración actuales: el estilo escandinavo.
Si, por el contrario, deseamos destacar el carácter desenfadado y/o divertido de un espacio, escoger piezas que contrasten por su diseño y/o color podría ayudarnos a conseguirlo. Esto suele darnos un poco mas de miedo, pero con algunas claves podemos conseguir un conjunto equilibrado:
- Escoge un sofá en tonos neutros y un reposapiés con color para darle protagonismo a este último.
- Escoge un reposapiés neutro y haz que destaque por su diseño o textura.
El material
Podemos encontrar en el mercado tanto reposapiés como puffs que pueden sernos igualmente útiles, en diferentes materiales. Los mas populares son aquellos modelos clásicos acolchados con fundas confeccionadas en tela, piel o símil de piel. Es en este tipo de reposapiés en los que encontramos, con mayor frecuencia, esos diseños ergonómicos y/o inclinados que tanto contribuyen a su confort.
Además, cada vez es mas frecuente encontrar poufs o fufs de tela, crochet o rafia en los salones con triple propósito: dar un descanso a nuestras piernas, proporcionar un asiento mas a nuestros invitados y servir como mesa auxiliar para dejar la revista que estamos leyendo o la bebida que nos disponemos a tomar. Para poder cumplir los tres fines, el pouf deberá ser estructurado, lo que a la hora de la verdad podría comprometer su capacidad como reposapiés.
El material además de influir en su estética y comodidad influye también en la practicidad de estos reposapiés. Y es que para mantenerlos como el primer día, unos requerirán mayores cuidados que otros. Tampoco la facilidad de limpieza será la misma en un diseño de ratán que en uno de tela.
Antes de escoger el reposapiés es, por tanto, aconsejable hacerse una serie de preguntas para acertar con nuestra elección. Preguntas cómo: ¿Dónde voy a colocar el reposapiés? ¿Quién va a usarlo? ¿Para qué se va a usar? ¿Necesito que cumpla mas de una función? ¿Es importante para mi que su mantenimiento y limpieza sea sencilla? Responder todas ellas que ayudará a invertir de forma mas consciente el dinero en la compra de un reposapiés.