El rechazo sexual dentro de la pareja

RECHAZO SEXUAL

No cabe duda que el sexo es una importante esencial y clave para el buen devenir de la pareja. Hay que saber disfrutar de los encuentros sexuales con la pareja ya que ello ayuda a enriquecer dicha relación y hace que todo vaya mucho mejor. El rechazo sexual es más habitual y común de lo que se pueda pensar en un principio y tiene fatales consecuencias para la pareja y para la persona que lo sufre, sobre todo si es negativo.

En el siguiente artículo te hablamos un poco más del rechazo sexual dentro de la pareja y de las consecuencias negativas que puede llegar a provocar en la relación.

Cuáles son las consecuencias del rechazo sexual

El impacto del rechazo sexual va a variar enormemente teniendo en cuenta el contexto en el que se realice. Si se produce en un contexto positivo, la parte rechazada puede mostrar algo de comprensión y los niveles de insatisfacción son bajos. Si la pareja no da ningún tipo de explicación ante el rechazo, los niveles de insatisfacción suben bastante enteros. Acto seguido te mostramos alguna de las consecuencias que tiene el sufrir un rechazo sexual por parte de la pareja:

  • Si el rechazo sexual es negativo es normal que la persona sufra una bajada importante en su autoestima. El no poder contentar sexualmente a la pareja provoca que las persona que padece tal rechazo empiece a desconfiar de si mismo y carezca de seguridad.
  • Otra de las consecuencias del rechazo sexual de la pareja es el sentimiento de resentimiento que comienza a producirse frente a la persona amada. Todo ello conlleva a que se acabe produciéndose una insatisfacción en la relación que puede dar lugar al fin de la misma. Es importante por tanto el citado resentimiento aparcado y sentarse a hablar con la pareja para intentar una solución a tal problema.

RECHAZO

  • El rechazo sexual negativo puede llegar a generar ciertas dudas acerca de la relación y poner en serio peligro a la misma. Una cosa lleva a la otra y dicho rechazo puede provocar que el ambiente se llegue a tensar tanto, que acaben saliendo a la luz, conflictos o peleas que van dañando poco a poco la relación.
  • Si el rechazo sexual es continuo y se vuelve habitual, es posible que la persona dañada busque afuera lo que no encuentra en casa. La infidelidad empieza a hacer acto de presencia con todo lo malo que ello conlleva al buen devenir de la relación. Es normal por tanto, que con el tiempo la relación se termine por romper.

En definitiva, el sexo es un elemento clave para cualquier pareja y la insatisfacción del mismo termina repercutiendo de manera negativa en la propia relación. El gran problema se produce cuando dicho rechazo a nivel sexual se habitúa en el tiempo y se vuelve normal. En principio no debería ser un problema si tal rechazo se produce de manera puntual. El diálogo y la comunicación con la pareja es clave a la hora de arreglar las cosas y evitar que el problema pueda ir a peor.


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