Los correctores se utilizan para cubrir manchas, corregir imperfecciones y unificar el tono del rostro cubriendo aquellas posibles decoloraciones que tenga nuestra piel. Es por esta razón por la que titulamos el artículo de hoy como «El corrector, nuestro mejor aliado». Con un buen corrector tendríamos casi solucionado el tema del tono de la piel. Cuando maquillamos el rostro lo que intentamos es que se vea bonito, con un aspecto uniforme, sin imperfecciones y con una tonalidad homogénea. Si conseguimos dar con ese corrector ideal para nosotras en cuanto a cobertura y durabilidad se refiere tendremos casi solucionado este punto.
El uso más habitual es el de tapar las ojeras pero también podemos tapar con ellos tatuajes, granos, venas enrojecidas o cicatrices.
Texturas del corrector
Los correctores podemos encontrarlos en diferentes texturas. A continuación las mencionamos y detallamos las cualidades de cada una:
- Líquidos: Son los más comunes y los más fáciles de trabajar sobre la piel. Son ideales para ojeras y granos pero el problema de estos correctores es que no dejan un aspecto uniforme.
- En barra: Estos correctores son más densos y duran más tiempo en el rostro. Se utilizan sobre todo para aquellas imperfecciones más marcadas como cicatrices. Al ser de textura más gruesa son algo más difíciles de trabajar.
- Crema: Es el punto intermedio entre los correctores líquidos y los de barra. Sirven para todo tipo de piel y se utilizan con una brocha o con una pequeña esponja. Su resultado es más uniforme que el líquido pero duran menos que los correctores en barra.
- Tipo lápiz: Son los que más se venden actualmente, sobre todo si son correctores iluminadores. Son muy parecidos a los correctores líquidos y se funden muy bien en la piel.
Colores del corrector
Dependiendo de lo que queramos cubrir, usaremos un color de corrector u otro. A continuación te decimos en qué tonalidades puedes encontrarlos y para qué sirve cada cual:
- Verde: Es el complementario del color rojo por lo que cualquier zona rojiza que tengamos en la piel será cubierta perfectamente con un buen corrector de tono verde. Ideal para espinillas, granos, venas, mejillas sensibles, etc.
- Amarillo: Es el perfecto para tapar ojeras moradas. Utilizando este color, la ojera morada se neutraliza y a continuación sólo quedaría utilizar una base de maquillaje para tapar el tono amarillo del corrector.
- Naranja: Para aquellas chicas con la piel extremadamente blanca. Sirve para tapar posibles venas azules.
- Rosa: Es el corrector perfecto para aquellas pieles más apagadas y fatigadas. Usar un corrector rosa aportará luz y buen aspecto al rostro. Lo podemos usar también como iluminador.
- Color piel: Es perfecto para tapar pequeñas manchas oscuras que no sean muy profundas.
Correctores que van bien
Actualmente podemos encontrar infinidad de marcas que venden en sus líneas ciertos correctores. Bajo el punto de vista de la experiencia y el uso de estos correctores vamos a nombrar algunos que son buenos por durabilidad en la piel y por hacer bien su cometido. ¡Ojo al dato!
- ‘Fit Me’ de Maybelline: Es un corrector de gama media que da muy buenos resultados. Es ligero, ofrece una cobertura media y está disponible en cuatro tonos. En cuanto a relación calidad-precio es genial. Ronda los 6 euros dependiendo del lugar de compra.
- ‘Corrector borrador’ de Maybelline: Este corrector no sólo tapa las manchas oscuras sino que también aporta luminosidad y juventud al rostro. Es un corrector anti-edad y su precio es de 8,99 euros.
- ‘Stick Antiojeras’ de Bourjois Paris: Es un corrector en formato barra. Su textura es algo grasa pero se extiende muy bien en la piel, es de larga duración y tiene tres tonalidades diferentes. Su precio es de 9 euros aproximadamente.
- ‘Corrector’ de Mary Kay: Está disponible en cinco tonalidades diferentes, es de textura crema por lo que se aplica bastante bien fundiéndose uniformemente con la piel y su precio es de 8 euros. Un punto muy a favor de este corrector es que es resistente al agua.
Algunos trucos usando corrector
- Si usas el corrector para tapar las ojeras aplica después de este con un pincel de pelo suelto algo de polvo translúcido. Esto hará que el corrector quede perfectamente sellado, dure más y no nos forme pliegues en la piel con el paso de las horas.
- Otro uso del corrector es modificar el tamaño y la forma de nuestros labios. Si queremos que nuestros labios se vean iguales o quitarle un poco de volumen podemos aplicar un poco de corrector por ellos.Esto tapará la línea real del contorno de nuestra boca. A continuación perfilaremos por la línea deseada y lo maquillaremos de forma habitual.
- Si usas el corrector antes de la base de maquillaje lo que consigues es que al aplicar la base se pueda arrastrar y eliminar el corrector. Es por esta razón por la que aconsejamos casi siempre usar el corrector después de la base, a no ser que nuestro corrector sea verdoso o amarillo y tengamos que camuflar el color.
- Si tus labios al natural tienen una tonalidad fuerte (rosado oscuro o color fresón) y casi no se te nota el tono de la barra de labios que has escogido, como paso previo a este puedes usar el corrector para neutralizar el color natural de tus labios. Esto hará que el labial que pongamos después se vea de su color real. Uso el corrector para este cometido si es en barra, ya que los que son líquidos pueden resecar tus labios y los que son en crema pueden hacer que el labial se expanda.
Esperamos que esta información haya sido útil para vosotras. ¡Feliz lunes y feliz semana!