El color blanco roto uno de los colores que más posibilidades nos abre en la decoración. A diferencia del blanco puro, el blanco roto aporta calidez a las habitaciones. Es, por tanto, un color mucho más acogedor para decorar las habitaciones. ¡Una gran elección decorativa!
Generalmente se aplica en paredes con el fin de potenciar la luz y que así los espacios se vean mas amplios, sin renunciar a esa calidez que el blanco puro nos roba. Sin embargo, puede ser tanto o mas interesante aplicar el blanco roto con el mismo objetivo en muebles y accesorios.
El blanco roto, una buena elección
El color blanco roto nos ayuda a crear espacios luminoso y por ende a ampliar visualmente estos. Es, además, un color versátil por lo que no nos limitan en absoluto a la hora de incorporar otros colores. Estos y otros son los principales motivos por los que consideramos este color ¡una buena elección!
- Es un color atemporal. Aplicado en las paredes raramente nos cansaremos de él consiguiendo así un espacio con muchos años de vigencia.
- Es versátil, puede combinarse con una gama de colores muy amplia y ser protagonista de espacios de estilos muy diferentes.
- Redecorar la casa es sencillo apostando por el blanco roto en paredes o muebles principales. Reservando el color para textiles y pequeños accesorios resulta sencillo y económico transformar un espacio.
- No es tan intenso como el blanco puro, convirtiéndose en un color ideal para crear una atmósfera mas recogida y cálida en una habitación.
Como incorporarlo a la decoración
Al ser un color neutro y atemporal podemos aplicar el color blanco roto tanto en paredes como en muebles o accesorios sin temor a cansarnos o a que pase de moda. Sin embargo, nuestro consejo es que si se aplica en la pared, no se aplique también en los muebles para que la estética no sea demasiado plana. Resulta mucho mas interesantes crear ligeros contraste de color: apostar por diferentes blancos y trabajar con otros colores.
En las paredes
Pintar las paredes en este color no te limitará a la hora de jugar con colores mas vivos y atrevidos en muebles, textiles y/o complementos. Como ya comentábamos antes, utilizando colores intensos únicamente en textiles y complementos conseguirás, además, que en el futuro resulte muy fácil cambiar el estilo de la habitación.
Las paredes en color blanco roto resultan especialmente interesantes en dormitorios y zonas de descanso, ya que aportan luminosidad pero al mismo tiempo un ambiente cálido y sereno. Son ideales para aportar calidez al estilo nórdico. Combinando paredes en este color con muebles de madera claras y/o en color blanco puro, accesorios de fibras naturales y matices en tonos pastel, lograrás ambientes naturales y acogedores.
En los muebles
Los muebles de color blanco roto encajan a la perfección en habitaciones con paredes de color blanco puro, a las que aportan calidez. Fíjate en las imágenes que hemos seleccionado. ¿Podrías decirnos que tienen en común? ¡Exacto! Son luminosos, cálidos e invitan a relajarse. La idea de combinar un cabecero blanco roto con ropa de cama en un blanco puro o una consola o cómoda del color que hoy nos ocupa en un recibidor decorados es tonos blancos y pasteles, nos encanta.
En el sofá
Apostar por un sofá con chaise longue que tenga un gran protagonismo en el salón es una de las propuestas que mas nos gusta en blanco roto. No llamará excesivamente la atención pero destacara sobre paredes en tonos blanco puro o gris claro a las que aportará calidez.
El gris es uno de los colores mas populares actualmente para vestir espacios de estilo contemporáneo a los que aporta cierta sofisticación. Sin embargo puede resultar frío, algo a lo que podemos poner remedio incorporando un sofá de color blanco roto que aporte ese sabor a hogar. Lo ideal es que apuestes por un sofá tapizado en tela y que escojas cojines en una combinación de colores que vayan desde los grises hasta los marrones.
¿Te gustan las ideas para utilizar el color blanco roto en la decoración de tu hogar?