La suciedad que arrastra el agua y la cal acumulados en filtros y tuberías provocan no solo que el agua no corra bien sino que aparezcan en nuestra cocina o baño otros problemas como malos olores o moho. Para lidiar con ellos te enseñamos hoy a crear tu propio desatascador de tuberías casero y compartimos contigo todos los trucos para usarlo correctamente.
Consecuencias de una tubería atascada
Los productos de limpieza o higiene, los restos de suciedad y/o la cal que el agua arrastra cuando nos duchamos o fregamos los platos unidos a una limpieza pobre o insuficiente de los filtros y conductos pueden provocar que las tuberías se atasquen. Y si ignoras estos atascos y no los solucionas a tiempo, podrías enfrentarte a consecuencias negativas como las que citamos a continuación:
- Bacterias y moho que pongan en riesgo tu salud. Las obstrucciones pueden generar acumulación de agua estancada, lo que crea un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias, moho y hongos en las tuberías que pueden tener consecuencias para la salud. Y es que la exposición prolongada a estos agentes puede desencadenar problemas respiratorios, alergias y enfermedades. Además, si tienes una obstrucción en las tuberías de desagüe, puede generarse un retorno de aguas residuales, lo que representa otro grave riesgo para la salud.
- Malos olores. La presencia de agua estancada, mohos y bacterias provoca a su vez que las cañerías huelan mal. El olor es de hecho una primera alerta para darnos cuenta que algo no está bien.
- Flujo de agua reducido. Otro de los problemas más evidentes es el flujo de agua reducido. Las obstrucciones pueden ipedir que el agua fluya libremente, lo que puede resultar en un caudal de agua débil o intermitente en grifos, duchas y otros puntos de agua en tu hogar.
- Daños estructurales. Los atascos no resueltos también pueden tener consecuencias graves en la estructura de tu hogar. Y es que el agua acumulada podría buscas la salida y filtrarse en las paredes, techos y suelos, lo que podría provocar daños estructurales como la corrosión de las tuberías y la debilitación de los materiales de construcción.
Desatascador de tuberías casero
Si hace tiempo que sospechas que tus cañerías están atascadas, ha llegado el momento de hacer algo. Con ingredientes tan habituales como el bicarbonato y el vinagre puedes crear un desatascador de tuberías casero eficaz. Dale una oportunidad. Si estos productos de andar por casa no funcionan o el el atasco es demasiado profundo habrá tiempo de acudir a productos comerciales mas potentes u otras soluciones como las que te presentamos a continuación.
Bicarbonato y vinagre
Con una combinación de bicarbonato y vinagre podrás crear una mezcla burbujeante para limpiar la tubería si la suciedad no está demasiado acumulada. Y para hacerlo solo tienes que reunir todos los productos necesarios: 1/2 taza de bicarbonato, un vaso de vinagre blanco y tres litros de agua hirviendo; y seguir un sencillo paso a paso.
- Espolvorea 1/4 de taza de bicarbonato sobre el desagüe y deja actuar unos 5 minutos.
- Después vierte medio litro de agua hirviendo. Este producirá una efervescencia que contribuirá a eliminar la suciedad de la tubería.
- Tras unos minutos vierte de nuevo bicarbonato en la misma cantidad y continuación un vaso de vinagre y deja que actúe unos 15 minutos. Aunque no puedas verlas volverán a producirse burbujas, con mayor intensidad que antes.
- Finalmente, para eliminar los restos de bicarbonato y vinagre vierte dos litros de agua hirviendo por el desagüe.
Alambre
También puedes crear otro tipo de desatascador con una percha de alambre. Solo tendrás que desarmar la percha, estirándola para darle forma de «U» en uno de los extremos. Una vez hecho conseguida la forma podrás utilizarla para introducirla por el desagüe y empujar o sacar los residuos que puedan estar taponando la tubería.
Cando el desatascador casero no funcione…
¿El desatascador de tuberías casero no ha funcionado como esperabas? Entonces prueba a utilizar un desatascador manual. Llena la ducha, el lavabo o fregadero con un poco de agua, coloca el desatascador sobre el desagüe y empieza a bombear durante unos minutos para que la suciedad suba y puedas recogerla.
¿Tampoco funciona? Entonces tienes dos opciones: recurrir a un producto comercial mas agresivo que el desatascador casero o abrir el sifón. Si te decantas por esta última opción, no olvides colocar un cubo debajo para recoger el agua y la suciedad que caiga.