La dermatitis seborreica es una enfermedad del cuero cabelludo que se caracteriza porque produce inflamación en el cuero cabelludo, la cara y en ocasiones afecta también a otras partes del cuerpo. Esta inflamación provoca que aparezcan escamas en la piel, con un gran picor o quemazón y síntomas similares a la rosácea, lo que puede crear confusión a la hora de diagnosticar la enfermedad.
Esta enfermedad es crónica, lo que significa que no existe un tratamiento que elimine por completo la dermatitis seborreica. Lo que sí es posible es aplicar tratamientos y cuidados que reducen notablemente los brotes y los síntomas cuando estos se producen. Por lo que, conocer las características de la dermatitis seborreica es la mejor manera de convivir con esta enfermedad manteniendo los síntomas bien controlados.
Causas de la dermatitis seborreica
Existen diferentes causas para la dermatitis seborreica, aunque es necesario acudir a la consulta del dermatólogo para dar con la causa en cada caso en concreto. Aunque existen factores que pueden complicar este problema, como el estrés, la falta de higiene o rascarse mucho la cabeza, lo habitual es que exista una causa médica como las siguientes.
- El hongo Malassezia furfur: Este hongo prolifera en zonas muy grasas de la piel, concretamente en el cuero cabelludo donde las glándulas sebáceas son especialmente activas. El hongo Malassezia furfur produce irritación, picor, descamación y los síntomas generales de la dermatitis seborreica.
- Cuando se interrumpe la renovación celular del cuero cabelludo: Este trastorno provoca que las células de la piel se desprendan y se unan entre sí, formando escamas amarillentas, caspa y picor. Las causas en sí de este trastorno pueden ser variadas, aunque existe un fuerte componente genético y con mucha probabilidad, la dermatitis seborreica se transmite de padres a hijos.
Síntomas
Si reconoces alguno de los siguientes síntomas, debes pedir una cita con tu dermatólogo lo antes posible. Es muy importante que el especialista realice la revisión correspondiente para dar con un diagnóstico y poder comenzar con un tratamiento a la mayor brevedad. Ya que el conocimiento es la mejor herramienta para mantener controlada la dermatitis seborreica.
Estos son los síntomas generales de la dermatitis seborreica del cuero cabelludo:
- Prurito, picor incesante que te provoca la necesidad de rascarte con fuerza en la zona donde se presenta la inflamación.
- Aparece caspa, no solo en el cuero cabelludo, también puede aparecer en las cejas, el bigote o la barba.
- Costras en el cuero cabelludo.
- Puede aparecer blefaritis, que es la inflamación de los párpados.
- La piel se vuelve muy grasa y enrojecida en algunas zonas del cuerpo.
- Escamas, inflamación o enrojecimiento en diversas zonas de la cara como la nariz, las orejas o las mejillas. Aunque también pueden salir en los hombros, las axilas o las ingles.
Tratamiento y prevención de la dermatitis seborreica
Para encontrar un tratamiento con el que poder controlar los síntomas de la dermatitis, es necesario acudir a la consulta del dermatólogo. Aunque en la mayoría de los casos la enfermedad no desaparece nunca, existen métodos muy eficaces para controlar y reducir los síntomas más severos. El dermatólogo suele recomendar productos de higiene capilar específicos para este tipo de piel y cabello.
También es posible utilizar fármacos con hidrocortisona, pero siempre deben estar controlados por el especialista. Así como el consumo de productos que reduzcan la caída del cabello, que es otra de las principales causas de la dermatitis seborreica del cuero cabelludo. En casa, la prevención es fundamental para controlar y mantener a raya los brotes de dermatitis.
- Evita tocarte el cabello en exceso, ya que estimula la producción de grasa.
- Utiliza siempre productos cosméticos diseñados especialmente para pieles delicadas, con dermatitis o grasos.
- Procura no rascarte la cabeza, porque esto favorece que aparezcan más infecciones, crea nuevas lesiones en la piel y empeora la inflamación.
- Sigue una alimentación muy saludable, con un gran consumo de productos naturales como las frutas y verduras.
- Elimina de tu dieta alimentos muy picantes, el alcohol y los alimentos muy grasos como los quesos, el embutido, los fritos y los ultraprocesados.
Mantener bajo control la dermatitis es una cuestión de constancia y dedicación. Aunque pueda parecer desesperante en los inicios, con unos buenos hábitos y un seguimiento del dermatólogo, podrás controlar la dermatitis seborreica del cuero cabelludo.