Deja de soñar en encontrar a la pareja perfecta para ti y la encontrarás. Es así de sorprendente… solo tienes que dejar de obsesionarte con encontrar a esa “persona” que te complete como pareja, que comiences a vivir tu propia vida, y solo entonces, será cuando realmente puedas encontrar, cuando menos te lo esperes…a esa persona que sin ser perfecta, te llenará por completo.
¿Qué sucede si decides vivir la vida como si nunca fueses a encontrar a esa persona ¿O vivir como si no importara lo que pase si conocemos a esa persona o no? Para ser honesto contigo, probablemente algunas cosas geniales… y te lo vamos a contar a continuación.
Podrías aprender mucho de ti
Cuando no centras toda tu vida en encontrar a alguien más para tratar de llenarlo, aprendes mucho sobre ti. En lugar de centrarte en lo que puedes hacer para hacer felices a otras personas, debes tratar de encontrar cosas que te hagan feliz. Nunca te das cuenta de cuánto no sabes sobre ti mismo hasta que tienes todo el tiempo del mundo para resolverlo. No centrarse en encontrar el amor abre tu mente a más cosas que solo eso.
Te vuelves más realista
Estamos tan concentrados en encontrar el amor que vemos en las películas que vemos o en los libros que leemos. De lo que debemos darnos cuenta es que esa historia de amor fue inventada por alguien, basada en sus fantasías, también se convierten en nuestras. Eso es lo que son. Nos dan expectativas sobre cómo deberían ser las relaciones, cuando la mayoría de las veces las relaciones reales no se parecen en nada.
Eso no quiere decir que las relaciones no puedan ser grandiosas y saludables, pero no puedes esperar que tus relaciones sean exactamente como son en esa película que has visto tantas veces que puedes recitarla palabra por palabra.
Cuando vives como si no fueses a encontrar a nadie, aprendes que tu vida no tiene que girar en torno al enamoramiento. Aprendes que hay más en la vida que solo la persecución. Te da tiempo para calmarte un poco y ver que no necesitas revisarte para ajustarte a los estándares de otras personas. Tienes la oportunidad de ser realmente tú mismo.
Dejarás de preocuparte por cosas inútiles
Estamos obsesionados con tratar de hacer cosas para hacer que la gente nos quiera. Tendemos a no actuar como nosotros mismos con la esperanza de que las personas quieran estar con nosotros en función de lo que podemos pretender ser en lugar de las personas que realmente somos.
Continuamente mencionamos el ser nosotros mismos porque aprender a ser uno mismo sin pedir disculpas es la clave para la verdadera felicidad. Si tienes que fingir ser otra persona para gustar a alguien, entonces esa persona no es la persona con la que deberías estar cerca. Aprenderás a ver lo ridículo que es preocuparse por todo lo que dicen y hacen a las personas. Levanta un peso de tus hombros física y mentalmente porque no estás constantemente estresado.
Y sin darte cuenta, cuando te encuentres en mitad de toda esa felicidad despreocupada, aparecerá esa persona imperfecta a la que sentirás perfecta.