Cuando somos jóvenes y abandonamos el nido materno para mudarnos de casa por primera vez, solos, con amigos o con la pareja, por regla general, no solemos llevar un presupuesto bastante amplio, sino que contamos con el dinero justo y necesario para una decoración austera y 100% básica. Este artículo está pensado para ti si es este tu caso. En él te vamos a dar unas pistas e ideas de decoración low-cost para los presupuestos más bajos.
Que tengas poquito dinero para la decoración del que va a ser tu nuevo hogar no tiene que conllevar que este sea feo y esté mal decorado. Gasta poquito pero crea ideas geniales como estas que a continuación os ofrecemos.
Antes de tirar, recicla
No sabes la de cosas que podemos reciclar para conseguir elementos decorativos ideales que irían bien casi en cualquier casa. Un ejemplo muy acorde y que queda genial en algún rinconcito de nuestro hogar, son las botellas recicladas. Pueden ser de plástico o de cristal, pero quedan mucho más finas y elegantes las segundas.
Bastaría con reciclaras y pintarlas de los colores que está decorada la estancia en las que quieres ponerlas. Quedan muy bonitas y elegantes si son en colores pasteles: malva, turquesa, verde agua, rosita palo, etc. ¿Y qué podríamos poner en ellas? Flores frescas en primavera, ramitas secas en otoño,… Eso ya os lo dejamos a vuestro ingenio e imaginación.
También se pueden reciclar los típicos palets de madera en los que van a veces la fruta y verdura a los supermercados y tiendas. Si lijamos estos, dejándoles una textura uniforme, para pintarlos posteriormente, de color blanco si queremos conseguir luminosidad en la habitación o simplemente dándoles una capaz de barniz, para darle un toque ‘vintage’ y retro a nuesto hogar, con ellos podremos hacer desde mesas auxiliares, hasta recipientes idóneos para la jardinería. Si apilamos un par de ellos, les colocamos unas ruedas giratorias en la base y un foam o espuma arriba con una bonita tela que lo decore, también pueden quedarnos unas sillas bastante necesarias para nuestro salón o habitación.
Para las paredes
Si tenemos un presupuesto mínimo y no podemos gastar mucho en muebles, siempre podrás encargarle a una carpintería conocida unas cuantas baldas de madera con las medidas que tú les indiques y posicionarlas y decorarlas tú a tu gusto. De esta forma podrás hacer una bonita y sencilla librería o un mueble auxiliar con cuatro cositas para poner la televisión del salón. Eso sí, necesitarás bastante silicona para pegar y algunas herramientas básicas para colocar. Si eres poco manitas para eso, siempre hay tiendas de decoración en las que podemos encontrar artículos bastante baratitos y low-cost en el que comprar los muebles por módulos. Si compras los muebles por separado y comparas precio de una tienda y otra casi siempre te saldrán más económicos que si ya los encargas hechos.
Por otro lado, está el tema pintura. No hay nada como pintar todas las paredes de blanco: es lo más barato, es lo más rápido, es el color de moda en decoración y es lo que más luz da a la casa. Para romper con tanto blanco en las paredes, otra idea muy sencilla y barata es la colocación de vinilos (los hay muy bonitos y de todo tipo) en puntos estratégicos. Por ejemplo: la silueta de una niña leyendo al lado de la librería; unas notas musicales al lado del equipo de música; un reloj grande en la cocina con los números de pegatina. Investiga por internet y encontrarás infinidad de ideas de este tipo para hacer con vinilos.
Plantas
Y como último consejo e idea low-cost que te daremos en este artículo, es la colocación de plantas, tanto de exterior si dispones de balcón o patio, como de interior. Aportan color y dan muy buena energía. Si dispones de poco tiempo para su cuidado, hazte con plantas que necesiten pocos cuidados: cactus, potos, etc. Te requerirán poco trabajo y sin embargo, te ofrecerán tanta calidez…