El crumble de melocotón es una receta clásica de postre de origen anglosajón que combina lo mejor de la repostería casera: una base jugosa de fruta fresca y una cubierta crujiente elaborada a partir de ingredientes sencillos como harina, mantequilla y azúcar. Este postre nos permite disfrutar del dulzor natural de los melocotones de temporada y ofrece una textura que conquista a todos los paladares. Su preparación es ideal para quienes buscan una receta fácil y rápida, pero sin sacrificar sabor y calidad.
En esta versión, hemos decidido sustituir el azúcar de la cobertura por almendra molida, aportando un toque especial con menos dulzura artificial. Además, ¡es una excelente forma de destacar el sabor natural del melocotón! ¿Quieres saber cómo hacer este delicioso crumble fácil y saludable? Continúa leyendo y no te pierdas ningún detalle.
Ingredientes para un crumble espectacular
- 2 melocotones maduros
- 1 chorrito de zumo de naranja
- 1 chorrito de brandy (puedes sustituirlo por ron o eliminarlo si lo preparas para niños)
- 75 g de harina
- 50 g de mantequilla fría
- 25 g de almendra molida
- 1 yogur griego (para acompañar)
- Canela molida opcional
Pasos básicos para preparar el crumble de melocotón
- Pela y corta los melocotones. Retira la piel y córtalos en trozos pequeños. Coloca estos trozos en un bol amplio y adereza con un chorrito de zumo de naranja y brandy. Deja que maceren durante al menos 15 minutos para potenciar su sabor.
- Prepara la cobertura crujiente. En otro bol, mezcla la harina, la mantequilla fría cortada en cubos y la almendra molida. Utiliza los dedos para formar una mezcla granulada con textura de migas. Este paso es clave para conseguir la textura auténtica de un crumble.
- Precalienta el horno y prepara el molde. Enciende el horno a 180ºC. Engrasa un molde apto para horno con mantequilla para evitar que se pegue la fruta.
- Ensamblado del crumble. Coloca la fruta macerada en el fondo del molde como base. A continuación, distribuye uniformemente la mezcla de harina y mantequilla por encima, asegurándote de cubrir bien toda la fruta.
- Horneado. Introduce el molde en el horno precalentado y deja que se hornee durante unos 30-40 minutos o hasta que la superficie esté dorada y crujiente. Este tiempo puede variar ligeramente dependiendo del horno.
Sirve el crumble de melocotón
Una de las mejores formas de disfrutar este postre es servirlo tibio. Puedes acompañarlo con un poco de yogur griego, que añade cremosidad y contraste al dulzor del melocotón y la cobertura crujiente. Si buscas un toque más especial, espolvorea un poco de canela molida por encima. También puedes añadir helado de vainilla o nata montada para un contraste delicioso entre temperaturas.
Consejos y variaciones
- Elige melocotones maduros y sabrosos. La calidad de la fruta es fundamental para un resultado espectacular. Si no tienes melocotones frescos, utiliza melocotones en almíbar, pero asegúrate de escurrirlos bien antes de usarlos.
- Prueba diferentes ingredientes. Si quieres darle un toque único, puedes añadir almendras laminadas, coco rallado o incluso avena a la mezcla de cobertura. Esto aportará un extra de textura y sabor.
- Adapta el dulzor a tu gusto. Este crumble es menos dulce gracias a la ausencia de azúcar en la fruta, pero si prefieres un resultado más dulce, puedes añadir una cucharada de azúcar moreno al macerar los melocotones.
¿Por qué elegir esta receta?
Este crumble de melocotón no solo es fácil y rápido de preparar, sino que también es una opción perfecta para aprovechar los melocotones de temporada. Su textura crujiente y su increíble sabor hacen que este postre sea ideal para cualquier ocasión, ya sea una comida en familia, una cena especial o simplemente para darte un capricho durante la semana. Además, su versatilidad permite adaptarlo a tus preferencias, añadiendo tus ingredientes favoritos o ajustando dulzura y sabores.
Incorpora este crumble a tus recetas habituales y sorprende a todos con este clásico de la repostería que nunca pasa de moda.