Quizá nunca hayas escuchado hablar de esta planta pero para eso estamos nosotras para informarte de lo saludable que puede llegar a ser y cuáles son sus mejores virtudes.
La frángula se conoce también como arraclán, es una planta con usos medicinales, su mayor virtud es tratar el estreñimiento ocasional, incluso se le conoce como la planta del estreñimiento, aun así, ofrece más beneficios fantásticos. Es una planta muy conocida y muy usada entre los usuarios que consumen productos naturales para bajar de peso, es muy útil para el estreñimiento aunque no se debe usar de forma prolongada ya que podría ser contraproducente para nuestro intestino.
Propiedades de la frángula
Es un arbusto de entre 3 y 6 metros de altura que crece en los bosques húmedos de Europa, norte de África y Asia. Es una planta con propiedades purgantes o laxantes, vermífugas, es cicatrizantes, emenagogas y coleréticas.
- Es un laxante muy eficaz: dependiendo de la cantidad, favorece a tener evacuaciones sólidas, no irrita y no provoca retortijones. Guarda minerales y sales, por lo que evita una posible deshidratación.
- Gracias a su acción colerética, el hígado funciona correctamente.
- Si lo utilizamos como tónico, puede ser un potente cicatrizante y trata las heridas difíciles.
Usos medicinales
Como comentábamos, su mayor uso es para tratar el estreñimiento, sin embargo, también puede ayudarnos con otro tipo de afecciones.
- Hemorroides.
- Depurativos.
- Trata los trastornos biliares.
- Estimula la eliminación de ácido úrico y prolifera la eliminación de los cálculos.
- Regula la menstruación de las mujeres.
- Laxante de acción suave.
- Estimula la expulsión de la bilis retenida en la vesícula biliar.
- Regula la acción y función del intestino pero sin crear un hábito de consumo para su funcionamiento.
Contraindicaciones y efectos secundarios
Como en todos los casos siempre que abusamos de un producto en exceso puede provocar daños inesperados y nada deseados. En el caso de la frángula puede ocasionar lo siguiente, toma nota.
- Dolor abdominal.
- Vómitos.
- Náuseas si se consume la planta fresca, por ello se aconseja consumirla seca.
- Por ello, no se debe consumir la corteza fresca porque es muy irritante.
- No se recomienda a mujeres embarazadas o en etapa de lactancia o durante la menstruación, debido a su poder antihemostático puede provocar hemorragia.
- No debemos combinarla con bicarbonato de sodio, sal de frutas o cualquier otro alimento alcalino, ya que puede evitar su efecto.
- Personas que sufren de inflamación intestinal no deberían consumirlo tampoco.
- Al igual que las que padecen hemorroides, abdomen agudo o gastralgias.
Cantidad recomendada
Los complementos alimenticios pueden ayudar a mejorar nuestra calidad de vida, hay que confiar en los productos ecológicos y naturales ya que quizá pequeñas molestias se pueden tratar sin tener que acudir a los medicamentos químicos.
Para consumir la corteza de frángula podemos hacerlo de dos maneras, la primera de ellas es a partir de una decocción y maceración del mismo. Pondremos a hervir 7 gramos de corteza de frángula por cada taza a consumir, hervimos durante 15 minutos y dejamos reposar 6 horas. Si se considera que es mucha cantidad se puede rebajar a 5 gramos o 3 gramos por taza.
La segunda opción es consumir una cucharadita al día del extracto de la planta.
Dónde encontrarla
La corteza de frángula la podemos encontrar en las tiendas especializadas de productos naturales, se suele encontrar para consumir como infusión ya que resulta muy cómodo para los consumidores. Su precio no es nada excesivo y puede ayudarte en épocas de estreñimiento.
Por otro lado, sin nosotros saberlo, esta corteza aparece en otros tantos productos que combinan distintas plantas para ayudar con nuestro tránsito intestinal.
Su sabor es rico, incluso llega a sorprender lo bueno que está, esto ayuda a que quizá se consuma más de lo debido, por esta razón, hay que seguir las indicaciones del fabricante y nunca excederse ya que puede ocasionar retortijones, dolor abdominal e irritación.