La vuelta a la rutina no solo supone problema para los adultos sino que también la sufren los más pequeños. Después de más de dos meses de vacaciones toca volver al cole, un hecho que en algunos casos puede suponer algún que otro problema.
Para evitar esto y conseguir que la vuelta al cole sea lo más llevadera posible, no pierdas detalle de una serie de consejos bastante prácticos y eficaces.
Organización
Para que no te coja el toro y todo marche perfecto es muy importante tener cierta organización. Coge una libreta y apunta todo lo que hace falta para la vuelta al cole. Desde las mochilas hasta los libros o la ropa. Al tenerlo todo apuntado puedes pensar con claridad y conseguir que todo salga bien. Si lo dejas todo para el final y no apuntas nada seguro que se te olvida todo y los nervios empiezan a aflorar afectando a los niños y al resto de la familia.
Reajustar el horario
Levantarse temprano es uno de los aspectos más complicados a la hora de volver al cole. Durante muchos días los pequeños no han tenido horario y seguramente se han acostado más tarde de lo normal y se han levantado a la hora que han querido. Con la llegada del colegio hay que volver a reajustar el horario para que los niños se acuesten más temprano y no tengan demasiados problemas a la hora de levantarse. Es aconsejable el empezar cenar mucho más temprano y acostarlos alrededor de las 21 30. De esta manera irán adaptándose poco a poco a la rutina diaria y se levantarán mucho mejor.
Apoyar a los niños
Durante los primeros días de cole es normal que los niños sean bastante reticentes a la hora de ir al mismo. Tanto si tu hijo es pequeño como un poco mayor, es muy importante que los apoyes y los ayudes a que la adaptación a la rutina del día a día sea lo mejor posible. Acompaña a tus hijos al colegio para que se sientan arropados y queridos y la vuelta al cole no les suponga un auténtico trauma. Es bueno que te pongas en su piel y seas comprensiva con ellos para que se se sientan comprendidos en todo lo posible.
Paciencia
Es bastante normal que a tu hijo le cueste al principio el volver al cole y pueda mostrar cierto rechazo a la hora de ello ya que ha disfrutado durante unos meses de las vacaciones. Cada niño es diferente y mientras algunos no tienen ningún problema a la hora de ir al colegio otros pueden pasarlo bastante mal al llorar en exceso o al enrabietarse. Con el tiempo y los días el niño empezará a cambiar de pensamiento y el ir a la escuela no será ningún suplicio y lo verá como algo normal. Es por ello que debes tener bastante paciencia y no perder los nervios a menudo ya que la vuelta al cole requiere tiempo. Con un poco de compresión por tu parte el pequeño irá adaptándose poco a poco a la nueva rutina.
Espero que hayas tomado buena nota de todos estos consejos y la vuelta al cole no se convierta en un trauma tanto para el niño como para los padres. Como ocurre en el caso de los adultos, la vuelta al trabajo no es algo fácil después de haber disfrutado de unas merecidas vacaciones. Es por ello que los niños necesitan unos días para asimilar que las vacaciones de verano han llegado a su fin y a partir de ahora toca centrarse en el colegio y en una rutina diaria.