Cómo tomar el sol con precauciones

Tomar el sol

Estamos en verano y nos gusta la playa, además de que estamos mucho más tiempo al aire libre y eso puede conllevar exponerse en exceso al sol. Si eres de las que disfruta tomando el sol y poniéndose morena porque a todos nos sienta bien un tono dorado en la piel, debes saber cómo hacerlo porque de lo contrario puedes poner en peligro tu salud.

Se puede tomar el sol y de hecho se recomienda estar al sol por la vitamina D, que es necesaria y que se produce con la luz solar. Pero un exceso siempre es perjudicial y no protegerse también. Así que tenemos que tener en cuenta todos los detalles si queremos broncearnos con seguridad.

Hidrátate por dentro

Precauciones para tomar el sol

Una de las cosas que debemos hacer para que nuestra piel se encuentre sana es hidratarla. Si vamos a exponernos al sol y la piel además está deshidratada sufrirá más, porque con el sol precisamente se seca más. Así que una buena forma de mantenerla en un estado perfecto es beber mucha agua a diario. Podemos ayudarnos con las infusiones, los zumos o incluso añadiendo unas rodajas de limón en el agua en verano.

Utiliza crema solar siempre que puedas

La crema solar se suele utilizar cuando vamos a la playa de forma única. Sin embargo, nos exponemos al sol en muchas más ocasiones. Es importante utilizar cremas hidratantes que incorporen protección solar, porque así estaremos cumpliendo dos funciones con un solo producto. Nuestra piel se ve expuesta a los rayos solares en muchas ocasiones, por lo que a veces no nos damos cuenta de cómo la perjudicamos. Si además somos de piel blanca, esto puede hacer que tengamos más riesgos de padecer problemas como cáncer de piel y melanomas.

Cómo usar la crema solar

Otra costumbre que deberíamos cambiar a partir de ahora mismo es la de utilizar la crema solar protectora una vez que hemos llegado a la playa. Se debe aplicar con antelación para proteger la piel, pues tarda en absorberse. Además, llevamos partes de la piel desprotegidas hasta que la usamos, por lo que en ese tiempo podemos llegar a exponernos al sol con sus consecuencias. La mejor opción siempre pasa por usar la crema con anterioridad y así llegar a la playa y olvidarnos además de esas zonas en las que nos aplicamos mal la crema.

Olvidarnos partes

Tomar el sol

Son  muchas las personas que se aplican la crema solar y se sorprenden después con partes en las que al aplicarla mal o en escasa cantidad tienen quemaduras o rojeces por el sol. Es importante aplicar la crema bien y a conciencia, por todas las partes del cuerpo. Hay lugares en los que no nos planteamos usar la crema como por ejemplo las manos o las orejas, y exponemos la piel igualmente. Así que es importante acordarse de todos los lugares en los que pueda dar el sol. Estos descuidos pueden hacer que aparezca el cáncer de piel en donde menos nos lo esperamos. Así que todos los cuidados son pocos a la hora de exponerse al sol.

Cuidado con el cuero cabelludo

Cuando nos exponemos al sol nos protegemos con crema solar. Pero la zona del cuero cabelludo queda igualmente expuesta y se trata de piel que es sensible. Por eso es muy recomendable que en verano utilicemos gorras o gorros para evitar que el sol incida directamente sobre el cuero cabelludo. Esto es especialmente importante si nuestro cabello no es espeso, pues se verá más expuesto. En el cuero cabelludo también pueden aparecer quemaduras por el sol. Además, el gorro nos ayudará a evitar que el sol incida directamente en la zona del rostro.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.