Se habla mucho de las defensas bajas y en ocasiones nos preguntamos, ¿Cómo puedo saber si me ocurre a mi? Lo cierto es que son una serie de síntomas los que pueden ayudarte a pensar que sí tienes un sistema inmunológico un tanto débil. Hay que tenerlo muy en cuenta, porque sino, nuestro cuerpo será más propenso a que los virus se apoderen de él.
Como no queremos estar enfermos cada dos por tres, lo mejor es intentar averiguarlo cuanto antes y por eso, te dejamos con los mejores consejos. Eso sí, recuerda que solo tu médico puede corroborar que realmente tienes las defensas bajas y darte algunas soluciones. Aunque nosotros nos hemos adelantado y también te comentamos las más habituales.
El cansancio excesivo puede ser síntoma de tener las defensas bajas
Estar cansados puede deberse a diversos motivos, dependiendo del ajetreo que tengamos cada día y es algo habitual. Pero lo que ya no lo es tanto, es cuando nos levantamos cansados y esto se va repitiendo cada día. De manera que si al realizar un esfuerzo que sea mínimo, ya te notas agotado puede ser sinónimo de las defensas bajas. Aunque como antes mencionamos, es algo que también debería ser tratado por un médico, a través de una analítica y de unas pruebas rutinarias.
Caída del cabello
Hay estaciones como la primavera y el otoño donde el cabello se cae de una manera más frecuente y en más cantidad. Esto lo sabemos y de ahí que no solemos preocuparnos. Pero si tienes un caída bastante intensa y no estamos en ninguno de esos meses, puede ser un detonante de tus defensas bajas. Sobre todo cuando también es algo prolongado en el tiempo y se acompaña de algún síntoma más de los que estamos mencionando. De ahí que una analítica tampoco viene nada mal para salir de dudas.
Infecciones muy frecuentes
Es cierto que en ocasiones podemos tener un resfriado, o bien nos puede salir un herpes y no ocurre nada más que unos síntomas molestos. Pero si es algo bastante frecuente, que se repite en poco tiempo, quizás tenemos que pensar que las defensas no están haciendo su papel. Algo que también se puede notar en las infecciones de orina, si son frecuentes y hasta en las encías que se inflaman. Sí, es cierto que todo ello puede ser síntoma de otro tipo de dolencias concretas, pero como decimos, también está dentro de los síntomas frecuentes de las defensas bajas y teníamos que mencionarlo.
Heridas que tardan más en curarse
Es cierto que hay que mencionar, que cuando las heridas no cicatrizan de la manera correcta y tardan en curar, puede deberse a diferentes causas. Tanto a nivel de problemas de circulación como tener diabetes. Pero si no cuentas con nada de lo anterior, entonces puede ser que tus defensas estén por los suelos y de ahí que el cuerpo no tenga una respuesta como debería ante esa herida. Así que como ves, siempre es imprescindible conocer lo que pasa en nuestro interior con un simple chequeo.
Qué hacer para fortalecer las defensas
Después de conocer las causas más frecuentes en que se desvela que las defensas ya no son lo que eran, tenemos que darte una serie de consejos o soluciones:
- Intenta llevar una dieta equilibrada donde los productos frescos como la verdura o las frutas estén en ella. Así como las proteínas, beber mucha agua y una porción de carbohidratos que nunca deben quedarse fuera.
- Hacer ejercicio de manera regular también nos ayudará.
- Aleja el estrés de tu vida dentro de lo posible. Para ello, saca tiempo para ti, medita o practica alguna actividad que te motive.
- El sueño también es una parte esencial y dormir alrededor de 7 u 8 horas, también.
Ahora ya sabes un poco más sobre las causas de las defensas bajas y algunas de las posibles soluciones. ¡El médico será el encargado de decirte el resto!