Todos hemos sentido esos dolores, en varias partes del cuerpo, tras la realización de un buen ejercicio físico. En ocasiones, hemos notado que cualquier movimiento, al día siguiente, era casi imposible. Tener agujetas es algo que a todos nos ha pasado y que nos puede seguir pasando.
Pero, ¿Cómo podemos combatir las agujetas? La verdad es que no hay una fórmula mágica para que desaparezcan del todo, pero sí que con pequeños pasos y consejos, las podemos llevar mucho mejor. Vamos a conocerlas un poco más y verás cómo las dominarás antes de lo esperado.
¿Qué son las agujetas?
Se pueden definir como pequeños desgarros que aparecen en las fibras musculares, por lo que todo ello se traduce en esos dolores que a veces se vuelven bastante insoportables. Lo más seguro es que las fibras sean más débiles de lo que pensamos y por ello, suceden dichos dolores. Suelen aparecer al día siguiente de un ejercicio intenso y hasta en ocasiones, se pueden extender más de un par de días. Aunque es cierto que no siempre con la misma intensidad del comienzo. No debemos de preocuparnos, aunque sí son molestas para poder realizar tareas tan sencillas como agacharnos o incluso caminar. Esto indica que el cuerpo ha estado sometido a un esfuerzo al que no está acostumbrado.
Cómo podemos prevenir las agujetas
Para hacer que esos dolores no sean tan intensos o simplemente para que no aparezcan, siempre podemos echar mano de algunas soluciones prácticas.
- Realiza un calentamiento previo: Lo mejor es poder calentar antes de pasar a la carga con nuestro entrenamiento. Ya que, aunque es algo que todos sabemos, no siempre lo llevamos rajatabla. Así, los músculos se irán adaptando a las circunstancias.
- Intensidad de los esfuerzos: No podemos llegar y darlo todo de repente, sino que es mejor ir poco a poco, repartiendo la intensidad de cada uno de los ejercicios que vamos hacer. Sobre todo cuando el cuerpo no está preparado para ello. Es decir, que el cuerpo se tiene que ir preparando de una manera paulatina. De este modo, conseguiremos un mejor resultado en todo lo que hagamos.
- Siempre debemos estirar: Está el calentamiento previo, pero luego, llegan los estiramientos. Otra de las pautas que no debemos olvidar. Es una manera de que los músculos vuelvan a su sitio inicial.
- Come de manera saludable y bebe mucha agua: Lo sabemos, pero tampoco está de más el recordarlo. Porque nos ayudará a que el cuerpo se recupere antes de lo posible. Beber mucha agua y consumir alimentos frescos y naturales son una de las mejores combinaciones.
Qué remedios hay contra las agujetas
Es cierto que siempre hemos escuchado muchos remedios, pero la gran mayoría se trata de una serie de mitos. Eso del agua con azúcar parece que no tiene una clase base científica que indique que realmente cure las agujetas. Lo mejor es seguir haciendo ejercicio pero de manera muy suave. Ya que no queremos recargar nuestros músculos, solamente intentar que no se endurezcan más de la cuenta. El realizar unos suaves masajes también es otro de los puntos importantes que pueden llevar a aliviar nuestros dolores.
Claro que si tienes unos dolores bastante intensos, entonces sí que aconsejamos no forzar más y descansar. En cuestión de poco tiempo, todo volverá a la normalidad. El devolver a los músculos su estado natural no es algo sencillo de conseguir ni tampoco tiene fórmulas mágicas, ya que los expertos no las han lanzado. De ahí que nos queda el volver poco a poco a la rutina y el poder descansar lo máximo posible, mientras tenemos una buena hidratación y alimentación.