Una de las partes básicas de nuestro maquillaje es pintarse los labios. Aunque a primera vista pueda parecer una tarea sencilla, lograr un acabado perfecto como el que vemos en tutoriales requiere seguir una serie de pasos que marcan la diferencia entre un maquillaje común y uno impecable.
Pintarse los labios correctamente no solo resalta la belleza natural, sino que completa un maquillaje bien ejecutado. Sin embargo, no se trata solo de aplicar color; los labios también necesitan cuidados específicos, al igual que cualquier otra parte de nuestro rostro. Cuidarlos e hidratarlos adecuadamente es el primer paso hacia unos labios irresistibles. A continuación, te explicamos de manera detallada cómo lograr unos labios perfectos y cuidados, integrando consejos para que el color dure más tiempo y luzca impecable.
Prepara y cuida tus labios antes de maquillarlos
El primer paso, y quizá el más importante, es preparar los labios para el maquillaje. Para ello, es imprescindible mantenerlos hidratados. Los labios resecos o agrietados no solo generan un aspecto poco atractivo, sino que también dificultan la aplicación uniforme del producto.
En invierno, las bajas temperaturas tienden a resecar más los labios, mientras que en verano, el sol puede dañarlos. Por eso, es clave utilizar productos hidratantes como bálsamos labiales con ingredientes nutritivos, vaselina o cacao para labios. Muchos de estos productos también ofrecen protección solar, algo fundamental para cuidar esta delicada zona del rostro.
Además de aplicar productos tópicos, mantener una dieta equilibrada y beber al menos 8 vasos de agua al día ayuda desde el interior a mantener la piel de los labios en perfecto estado. También es recomendable exfoliar los labios una vez a la semana para eliminar las células muertas. Una solución casera es mezclar azúcar y miel, y aplicar la mezcla con movimientos circulares suaves.
Define los labios con una base de maquillaje
Un paso que muchas personas pasan por alto es el uso de una base para definir los labios. Antes de aplicar cualquier labial, utiliza un poco de tu base de maquillaje habitual y aplícala alrededor de los labios. Este truco no solo define mejor la forma de tus labios, sino que también ayuda a corregir asimetrías.
Para obtener un acabado impecable, difumina la base cuidadosamente con un pincel o esponja, asegurándote de que no queden marcas visibles. Este paso es ideal para quienes quieren resaltar el volumen de los labios de una manera sutil pero efectiva.
Corrige imperfecciones con un corrector
Si notas pequeñas imperfecciones o áreas con tono desigual alrededor de los labios, ¡el corrector será tu mejor aliado! Aplica una cantidad mínima de corrector, preferiblemente de alta cobertura, justo en las áreas que lo necesiten. Difumina bien para que el resultado sea natural.
Un buen corrector también funciona como base para que el labial se adhiera mejor y dure más, evitando que el color se corra o pierda intensidad con el paso de las horas.
Delinea los labios para una forma perfecta
Delinear los labios es un paso que puede marcar una gran diferencia. Utilizar un lápiz perfilador del mismo tono que tu barra de labios ayuda a definir los contornos y a evitar que el color se salga de las líneas con el tiempo.
Empieza delineando el arco de Cupido (la zona central del labio superior) y luego traza la línea hacia las comisuras. Repite el proceso en el labio inferior. Si deseas que tus labios parezcan más gruesos, perfila ligeramente por fuera de tus labios naturales. Por el contrario, si prefieres un efecto más sutil, mantente dentro de los límites naturales.
Este paso también es esencial para quienes buscan corregir asimetrías o crear un efecto de mayor volumen. Recuerda que un buen delineado es la clave para que el resultado final sea profesional.
Pinta los labios y asegura la duración del color
Una vez que los labios están correctamente delineados, es momento de aplicar el color. Utiliza un pincel para labios para tener mayor control y precisión mientras rellenes. Aplica la barra de labios directamente si buscas un acabado más rápido, pero asegúrate de no salirte del delineado.
Para que el color dure más tiempo, sigue este truco: después de aplicar la primera capa de labial, presiona un pañuelo de papel entre tus labios para eliminar el exceso. Luego, aplica una ligera capa de polvos translúcidos sobre los labios con una brocha y finaliza con otra capa del labial. Este método asegura un acabado intenso y duradero.
Trucos adicionales para unos labios impactantes
Para un toque final que haga que tus labios se vean aún más atractivos, aplica un labial más claro o un toque de brillo en el centro del labio inferior. Esto crea un efecto de luz que hace que los labios parezcan más voluminosos.
Otra opción es usar un lápiz blanco para crear iluminación en zonas estratégicas. Asegúrate de difuminar bien para que el acabado sea natural. Si quieres un efecto aún más profesional, utiliza un pincel fino con un poco de corrector para limpiar los bordes exteriores después de aplicar el color.
El arte de pintarse los labios no solo consiste en aplicar el labial; incluye preparación, técnica y estilo. Siguiendo estos pasos al pie de la letra, puedes lograr unos labios cuidados, definidos y con un color que dure todo el día. No olvides que cada detalle cuenta al momento de lucir un maquillaje perfecto. ¡Atrévete a probar y saca el máximo partido a tus labios!