Si usamos velas es necesario saber cómo limpiar la cera de vela de manera sencilla para no volvernos locos si nos toca hacerlo. Parece un elemento difícil de quitar, pero como vamos a ver no tiene porqué ser así.
Las velas dan a las estancias donde estamos un ambiente acogedor que nos encanta para ciertas ocasiones, su cera se puede derramar si movemos las velas y nos pueden entrar las dudas de cómo limpiarla. Es un trozo de cera ya seco pegado en nuestro mueble o nuestro mantel ¿Ahora qué?
Cómo limpiar la cera de vela
Limpiar la cera de vela puede ser un quebradero de cabeza, pero debemos fijarnos en como es esa cera. Muy caliente se vuelve líquida y en que enfría sólida. Esto es importante a la hora de saber como retirarla. Pero antes de hablar de ello un consejo. Lo ideal siempre que tengamos velas encendidas es ponerlas en un cuenco o recipiente para evitar que se puedan caer y quemar algo de casa, y además evitar tener que limpiar cera. Otra opción es usa el tipo de velas que van en vaso.
Aún con precauciones, podemos derramar cera sin querer y si sucede, lo primero es retirar esos restos de cera lo más rápido posible, eso sí, esperando un par de minutos a que endurezca.
Limpiar cera de una superficie dura
Si la cera de vela cae en el suelo, en un mueble o una superficie dura lo primero que debemos hacer es retirar la cera seca con algo que pueda rascar: rasqueta, cuchillo, bisturí, etc… Quitaremos con cuidado para no dañar la superficie de abajo.
Una vez retirada la gota de cera pueden pasar varias cosas: que no se note ya tan a penas la mancha de cera si la superficie es mate o que se note mucho si la superficie es brillante. Esto depende también de la porosidad, si el material sobre el que ha caído no es poroso igual con este paso ya tenemos solucionado el problema. Si, por otro lado, el material es poroso habrá dejado todavía mancha.
Indiferentemente del material podemos hacer el siguiente paso para dejarlo limpio. Nada más retirar la cera con la espátula, debemos frotar bien con un trapo con agua caliente y jabón (preferiblemente uno desengrasante como el friegaplatos).
Si la superficie es de madera
Retiraremos la cera calentándola (con un secador por ejemplo). Aplicamos calor y limpiamos al mismo tiempo con una bayeta limpia siempre para no extender restos de cera por otros lados. Una vez retirada limpiaremos la madera con nuestro limpiador habitual.
Limpiar una superficie textil
Esta es la peor de las opciones, pero puede pasar. En este caso debemos ser rápido actuando. Hay que retirar toda la cera posible mientras no endurezca. Si la cera penetra en las fibras será mucho más complicado.
Un truco es poner a ambos lados de la mancha papel absorbente como el de cocina y aplicar calor para derretir la cera y ésta impregne el papel. Debemos ir cambiando el papel cada poco hasta retirar toda la cera posible.
Quizá quede mancha después de todo lo anterior, en ese caso, debemos aplicar un limpiador específico para retirar manchas de resina y ceras, en el mercado hay diferentes opciones.