Uno de los grandes clásicos del maquillaje para vernos mejor día a día es el rímel para pestañas. Este producto lo que hace es alargar y espesar visualmente nuestras pestañas de forma que destaquen mucho más nuestra mirada. Por eso hay quien solamente utiliza un poco de rímel, un eyeliner y pintalabios rojo con sus grandes básicos a la hora de maquillarse.
El rímel casero es una gran opción a la hora de tener este producto, porque sabremos todos los ingredientes que utilizamos y además podremos renovarlo con facilidad. No hay que olvidar que uno de los mayores problemas del rímel es que en seguida se seca y tenemos que reemplazarlo por otro para evitar los grumos y un mal aspecto en las pestañas.
Por qué hacer tu propio rímel
Hay muchas personas que sufren alergias y tienen mucha sensibilidad en la piel, por lo que puede que no le valgan los rímeles de marcas comerciales. Además, en casa podemos utilizar alternativas que son un poco más respetuosas con el medio ambiente y que al mismo tiempo cuidan mucho más nuestras pestañas. Al hacer un rímel casero probamos un producto que puede ser bueno para las pestañas. Si estas tienden a caerse o son finas, es bueno poder aplicar un rímel que las fortalezca.
Trucos para destacar tus pestañas
Es importante guardar un cepillo de pestañas como el que tenemos en los rímeles comerciales que compramos. Este tipo de cepillos son los que usaremos para aplicar nuestros productos. En ocasiones no tenemos ni por qué utilizar un rímel, sino que solamente tendremos que destacar las pestañas. Si tenemos unas pestañas espesas y fuertes, lo que tenemos que hacer es utilizar un poco de aceite de ricino, aplicarlo en ellas y peinar con el cepillo. Su tono destacará y fortaleceremos las pestañas mucho más. El mismo efecto se puede lograr utilizando un poco de vaselina.
Cómo hacer rímel casero
Una de las formas que tenemos de hacer rímel casero es mezclar una sombra en polvo negra que tengamos y no usemos mucho con un poco de gel de aloe vera natural. El aloe vera nos ayudará a cuidar nuestras pestañas. Debemos mezclarlos y crear una pasta que sea espesa para poder aplicarla sobre las pestañas. Si hemos guardado un tubo de rímel viejo que hayamos limpiado previamente podemos meter ahí la mezcla, porque desde luego nos resultará mucho más fácil de aplicar.
Si lo que deseamos es tener un rímel que sea cien por cien natural, podemos utilizar determinados ingredientes. Necesitaremos un trozo pequeño de carbón, aloe vera, aceite de almendras y agua destilada. El carbón se debe triturar y tamizar para que quede muy fino y podamos trabajar con él sin que genere grumos y estropee la mezcla. A continuación, debes mezclar dos cucharadas de cera y dos de aceite de almendras con una de agua destilada y ponerlo todo al baño maría. Cuando se caliente se retira del fuego y se añade varias cucharadas de carbón y de aloe vera. Se mezcla con cuidado removiendo bien hasta obtener una pasta. Una vez se enfríe ya podemos meterlo en el bote de rímel y así habremos conseguido un estupendo rímel casero con ingredientes fáciles de obtener.
Con los rímeles caseros debemos tener ciertas precauciones. Una de ellas es que debemos tener el cepillo y el recipiente bien limpio. Estos rímeles con ingredientes naturales tienden a estropearse con mucha más facilidad, por lo que pueden aparecer bacterias que no son beneficiosas. Es por eso que la mejor idea es conservarlos en una nevera para que no se estropee el producto y nos dure mucho más tiempo.