Discutir con la pareja es algo bastante habitual que suele generar problemas en la propia relación. Dichas discusiones no tienen por qué ser siempre perjudiciales y se puede llegar a solucionar siempre y cuando se sepa manejar dicha situación.
En el siguiente artículo te vamos a dar una serie de pautas que te ayudarán a tratar tales discusiones y encontrar la mejor solución a las mismas.
Las discusiones en la pareja
Dentro de una relación son inevitables las peleas o discusiones entre los integrantes de la misma. Al principio todo es muy bonito y la fase de enamoramiento prima sobre posibles conflictos. Con el paso del tiempo, ciertos factores y hechos hacen saltar la chispa para que se terminen produciendo diversos conflictos y peleas.
La convivencia no es nada fácil y es absolutamente normal que de vez en cuando se produzcan discusiones dentro de la pareja. El problema se produce cuando las peleas son habituales y normales dentro de la relación. Ante ello es esencial el poder saber gestionarlas y evitar que dichas discusiones puedan dañar seriamente la relación.
Cómo gestionar las discusiones en la pareja
- Las discusiones hay que saber gestionarlas para llegar a un final que beneficie a ambas personas. Toma buena nota de una serie de pautas o claves que te permitirán solucionar los posibles conflictos con tu pareja.
- En primer lugar hay que identificar el sentimiento o emoción que ha dado lugar a tal discusión. A partir de ahí es importante saber la causa de todo ello y la mejor manera de llegar a una buena solución que ponga al fin al conflicto.
- Si se produce una pelea con la pareja es importante afrontar el problema y dialogar con la otra persona. Solo de esa manera se pueden solucionar las cosas.
- De nada sirve el acusar a la pareja a pesar de que puedas llegar a tener razón. Lo importante es evitar que el conflicto vaya a más por lo que debes calmarte e intentar hablar las cosas.
- En las discusiones el aspecto emocional gana muchos enteros y son muchos los que pierden los papeles sin tener en cuenta lo que ello acarrea. No se puede faltar el respeto a la otra persona en ningún caso ya que el daño puede ser profundo a la vez que irreparable.
- Si tienes que hablar algo importante con tu pareja, es bueno el escoger un lugar tranquilo en el que poder hablar las cosas sin el riesgo de llegar a la temida discusión.
- El orgullo suele ser el causante en muchas ocasiones de que la pelea vaya a más y el daño se incruste dentro de la pareja. No siempre se lleva razón y no pasa nada por pedir perdón y dejar de lado al orgullo.
- Otro de los errores más comunes y habituales a la hora de discutir con la pareja consiste en sacar diversos hechos del pasado. Reprochar tales cosas solo va a empeorar todo y provocar que la pelea vaya a más.
- Si se produce una pelea lo importante es llegar a un acuerdo y poner diversas soluciones sobre la mesa. Es la mejor manera de que gestionar una discusión y evitar que todo empeore y pueda dañar seriamente la relación.