En mayo, empieza el buen tiempo, la primavera se asienta y deja paso a las temperaturas más altas. Realizamos el cambio de armario y llevamos ropa más fresca y suelta. Sin embargo, también podemos tener problemas relacionados con la hinchazón o la sensación molesta de tener el cuerpo hinchado.
La retención de líquidos afecta más a las mujeres, sobre todo en épocas relacionadas con desajustes hormonales, como los días previos a la menstruación, el embarazo o la menopausia. Sin embargo, también pueden sufrirlo los hombres.
En este artículo, os contaremos por qué retenemos líquidos, las causas que provocan esa retención, cómo combatir la retención de líquidos y cuáles son los remedios caseros que podemos realizar para evitar esta molesta hinchazón.
La retención de líquidos afecta a muchas personas, por diferentes motivos y a todas las edades. Las partes del cuerpo que más se ven afectadas son el abdomen y las extremidades, pies y tobillos sobre todo.
Es una dolencia molesta y que afecta a la calidad de vida de las personas. Cuando el agua no circula bien, y se deposita en el organismo, comienzan a presentarse diferentes problemas. Se debe conocer las causas para evitar esa posible retención de líquidos.
¿Por qué retenemos líquidos?
Cuando nuestro cuerpo detecta un nivel bajo de líquidos, ya sea porque no hemos ingerido buena cantidad de agua o porque tenemos demasiado sodio en el organismo, éste hace que se active un mecanismo de defensa y cierra las puertas para retener todo tipo de líquido que considera necesario para mantener el equilibrio.
Cuando hemos comido copiosamente una comida es normal que nos levantemos con las manos hinchadas, los tobillos, los labios o los párpados, es el mecanismo que utiliza el organismo para nivelar el exceso de socio a través de la retención.
No tenemos que alarmarnos, existen métodos para luchar contra la retención de líquidos, al menos, que nos permiten mitigarla. Una correcta alimentación, unos hábitos de vida saludable y un poco de fuerza de voluntad será suficiente para observar los primeros resultados.
Causas de la retención de líquidos
Tenemos que tener en cuenta que si a pesar de mejorar nuestra alimentación y realizar actividad física no vemos una diferencia en cuanto a la retención de líquidos de nuestro cuerpo, sería conveniente acudir al médico de cabecera para que pudiera determinar la causa más profunda que lo realiza.
Según sea la causa, el médico deberá pautar un determinado tipo de tratamiento u otro. Es importante determinar primero la causa para que se pueda establecer el mejor tratamiento.
Malos hábitos de vida
En este aspecto, si utilizamos mucha sal durante la comida puede que la retención de líquidos se agrave y se acelere. El sedentarismo, el alcoholismo y el tabaquismo también pueden provocar este aumento de líquidos en nuestro organismo.
Factores externos
Cuando suben las temperaturas y hace calor, esto provoca que el líquido salga por los vasos sanguíneos sin que los tejidos puedan absorber la cantidad necesaria. Por otro lado, las personas que pasan mucho tiempo en la misma posición, como en los viajes largos también puede provocar este aumento de la retención de líquidos.
Actividad hormonal
Muchas personas tienen problemas hormonales, en el caso de las mujeres se hace más presente durante la menstruación ya que se retienen más líquidos de lo normal. Esta situación es transitoria, por lo que no hay que preocuparse.
También durante el embarazo, las mujeres suelen padecer retención de líquidos, durante esos meses se produce un gran cambio hormonal en el cuerpo de la mujer y uno de los síntomas más comunes es la hinchazón de pies, manos o inflamación de rostro.
Ciertas enfermedades
También encontramos que la retención de líquidos puede suceder debido a un daño crónico hepático (cirrosis). Las partes del cuerpo que más quedan afectadas son las extremidades inferiores y el abdomen. No conviene olvidar que son los riñones los que controlan nuestros líquidos y si hay un desorden en ellos, produciría esa retención.
La insuficiencia renal como la cardíaca generan edemas en determinadas zonas, ya que los fluidos no pueden trasladarse libremente.
Algunos medicamentos
Ciertos medicamentos a base de corticoides, algunos antiinflamatorios y determinados fármacos para tratar la diabetes pueden tener como efecto secundario la retención de líquidos. La automedicación no es nada recomendable, consulta siempre a un profesional.
Aprende a combatir la retención de líquidos
Cuando la retención de líquidos sea una consecuencia de algún medicamento, el médico es posible que ya le indique algún diurético que te permita evitar esa situación, una dieta basada en alimentos ricos en agua y con propiedades diuréticas.
Lo más recomendable es adoptar y mejorar los hábitos de vida, de alimentación y ejercicio físico. Abandonar el sedentarismo, procurando ejercitarse a diario durante al menos 30 o 40 minutos, cambiar de postura cada 15 minutos.
Evita los alimentos ricos en sal y azúcares
Una alimentación variada, llena de productos frescos es una de las soluciones que mejor funcionan para liberarlos de la retención de líquidos. Evita alimentos ricos en sal como los salazones, los aderezos, palomitas, y algunos quesos, como el roquefort. También las comidas azucaradas como los postres, golosinas o comida rápida.
Aumenta la suma de proteínas a tu dieta
Aumenta una buena cantidad de proteínas, las proteínas si faltan en nuestra dieta, se reduce de manera drástica la producción de albúmina, que puede provocar la acumulación de líquidos entre los tejidos.
No olvides la fruta
La fruta es una aliada para mantener el correcto equilibrio de líquidos, recomendamos consumir los que sean ricos en potasio, como el melón, la sandía o los plátanos, además de verduras como la alcachofa, las acelgas o la calabaza.
No te olvides de beber dos litros de agua al día
Siempre se ha dicho y siempre se dirá que se deben beber al menos dos litros de agua al día para mantener una buena salud, es fundamental no superar los 4 litros de agua para no tener una sobrecarga, intenta seleccionar las aguas que no contentan sodio para que la limpieza sea efectiva.
No dejes de el ejercicio regularmente
Caminar a buen ritmo durante 30 minutos al día puede ser un buen comienzo para mantenerse en forma, pero no hay que olvidar consumir agua antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios. Programa algunas actividades físicas que te ayuden a mejorar la circulación.
Esperamos que estos consejos puedan ayudarte con tu problema de retención de líquidos y si crees que tu caso es más grave