El “síndrome del gato paracaidista” o “síndrome del gato volador”, hace referencia a uno de los accidentes mas frecuentes que sufren los gatos domésticos. Aprovechándose de nuestros descuidos y siendo fieles a ese carácter curioso que les caracteriza, son muchos los que anualmente se precipitan al vacío desde ventanas o terrazas.
Estas caídas que afectan principalmente a la cabeza, la región posterior, el abdomen y el tórax, pueden evitarse. ¿Cómo? Adoptando medidas que eviten que los gatos puedan asomarse a las ventanas o subirse a la barandilla de la terraza y fomentando otro tipo de juegos para saciar su instinto.
El síndrome del gato paracaidista
«Los gatos caen siempre de pie» es algo que probablemente hayas escuchado. Es un dicho que se apoya en la capacidad instintiva del gato de caer sobre sus cuatro patas sea cual sea su posición antes de precipitarse. Ocurre así porque el peso de su cuerpo está distribuido de forma simétrica y armónica de tal manera que el centro de gravedad coincide con el centro geométrico de su cuerpo. Una característica que le permite restituir su posición durante el proceso de caída si esta es lo suficientemente larga.
No siempre consiguen, sin embargo, restituir esa posición. Como consecuencia los gatos pueden ser víctimas de serias lesiones que afectan principalmente a la cabeza, la región posterior, el abdomen y el tórax, que les llevan al veterinario.
Cómo evitar las caídas
Los gatos son ágiles y tienen un gran sentido del equilibrio. Pero también son curiosos y tienen un gran instinto cazador. Un ruido o una ráfaga de aire inesperado, un pájaro al que quieren dar caza… pueden convertirse en un factor que desequilibrante y hacer que se precipiten desde la ventana o barandilla de la terraza.
De ahí que sea importante limitar el acceso a estos lugares. ¿Cómo?, ¿Cerrando las ventanas y balcones para evitar que se encarame a ellos? Es una forma de prevenir el síndrome del gato paracaidista ¡sin duda! Sin embargo, resulta mas cómodo instalar mosquiteras o redes que nos permitan a nosotros ventilar y a ellos disfrutar del aire fresco ¡sin peligros!
En el mercado puedes encontrar diferentes productos, por lo que no te resultará difícil encontrar uno que se ajuste tanto a tus necesidades como a tu presupuesto. Con un marco y una malla o celosía tu misma puedes construir una red de seguridad para tus gatos. También encontrarás numerosas empresas que las fabrican a medida y te las instalan.
Además de asegurar ventanas y terrazas, tendremos que proporcionarle a nuestro gato elementos que despierten su curiosidad en el interior de nuestro hogar. Elementos con los que entretenerles y ocupar su tiempo: juegos interactivos, muebles con plataformas, búsqueda de comida…
¿Tienes un compañero gatuno en casa? ¿Conocías el síndrome del gato paracaidista?