El sexo es un elemento esencial y fundamental en el día a día de una pareja. Es normal por tanto que puedan surgir ciertos problemas cuando hay una falta de sexo evidente en la relación o ante el hecho de que una de las partes sea adicto al sexo. Dicha adicción supone un auténtico problema para la persona en sí, ya que tal obsesión por el sexo termina por incidir de manera negativa en las diversas áreas de la vida como el trabajo o la familia.
Para evitar esto, es importante que la persona se de cuenta y sea consciente en todo momento que sufre un problema y que debe ser tratado rápidamente para evitar que la pareja se rompa.
Cómo saber si la pareja es adicta al sexo
La gran mayoría de las veces resulta complicado saber si la pareja es adicta al sexo. La persona adicta intenta camuflar su problema para que la otra persona no se dé cuenta de nada. Sin embargo hay una serie de señales que pueden hacer indicar que la pareja sufre un problema de adicción al sexo:
- No se va a la cama a dormir de manera conjunta y prefiere quedarse viendo la televisión o navegando por Internet hasta la madrugada.
- Se vuelve hermético y no le cuenta a la pareja lo que hace.
- Sufre cambios de humor bruscos después de tener sexo.
- Hay una falta de comunicación evidente con la pareja en lo que respecta a las relaciones sexuales.
- Tienes serios problemas a la hora de relacionarse con otras personas.
- Miente mucho y apenas dice la verdad.
- Oculta pornografía para que la pareja no se enfade.
Cómo actuar si la pareja es adicta al sexo
No es fácil ni sencillo el descubrir que la pareja es adicta al sexo. Lo normal es que dicha adicción termine por romper tal relación. Al descubrir tal adicción hay una falta de confianza en la pareja que es difícil de subsanar y arreglar. Sin embargo hay casos en los que se decide solucionar tal problema e intentar que la relación se vuelva mucho más fuerte. En tales casos es importante que el adicto sea consciente de que tiene un problema y que quiere solucionarlo para salvar a la relación.
Un primer paso es acudir a un profesional en adicciones que ayude a la persona a superar tal problema. Se trata de un camino largo a la vez que complicado ya que resulta esencial el volver a instaurar en la pareja valores tan importantes como la confianza, el amor o el respeto. Si no es posible volver a confiar en la pareja, es muy complicado y difícil que la relación vuelva a funcionar.
En definitiva, la adicción al sexo supone un gran problema para el buen devenir de la relación. No es fácil el llevar una vida en pareja con alguien que sufre este tipo de adicción, ya que a largo plazo se ven vulnerados valores inherentes a la pareja como el respeto o la confianza. El luchar por la relación y querer tratar dicha adicción es esencial para que la pareja no se termine rompiendo.