El chocoflan, también conocido como pastel imposible o tarta mágica, es un delicioso postre que combina dos de las mejores cosas del mundo de la repostería: el chocolate y el flan. Su peculiaridad radica no solo en su sabor, sino en el «acto de magia» que sucede durante su cocción. Cuando se hornea al baño maría, las capas de flan y brownie invierten su posición, creando un efecto visual tan impresionante como su sabor.
Este postre es perfecto para ocasiones especiales y es un favorito en muchos países de Latinoamérica, en especial México. La combinación de texturas y sabores promete conquistar hasta los paladares más exigentes. Si alguna vez pensaste que era difícil prepararlo, ¡te sorprenderá lo sencillo que puede ser si sigues nuestra receta paso a paso!
Ingredientes necesarios
Antes de comenzar, es importante preparar todos los ingredientes. Asegúrate de que todos estén a temperatura ambiente para facilitar la preparación. Aquí te detallo los componentes para cada capa del chocoflan:
Para la capa de chocolate:
- 200 g de chocolate para postres (preferiblemente de buena calidad para un mejor sabor).
- 125 g de mantequilla a temperatura ambiente.
- 3 huevos grandes.
- 200 g de azúcar.
- 3 cucharadas de cacao puro en polvo.
- 125 g de harina.
- 1 pizca de sal.
Para el flan:
- 4 huevos.
- 200 ml de leche condensada.
- 400 ml de leche.
- 1 cucharadita de vainilla líquida.
Para decorar (opcional):
- Caramelo líquido (puedes hacerlo casero o usar uno comercial).
Paso a paso para preparar el chocoflan
Sigue estos sencillos pasos para lograr un chocoflan perfecto. Recuerda que la paciencia en el proceso de horneado y el respeto por los tiempos son claves para que las capas se inviertan correctamente.
Preparación previa:
- Precalienta el horno a 190ºC. Coloca una bandeja con agua hirviendo en el horno para crear el efecto de baño maría.
- Engrasa el molde que vas a usar con mantequilla y cúbrelo con una ligera capa de caramelo líquido.
Preparación de la capa de chocolate:
- Derrite la mantequilla en el microondas y añade el chocolate troceado. Mezcla hasta obtener una mezcla homogénea. Si es necesario, calienta ligeramente para que el chocolate termine de derretirse.
- En un bowl aparte, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla se vuelva cremosa.
- Incorpora esta mezcla al bol con el chocolate y remueve bien.
- Añade el cacao en polvo, la harina y la sal tamizadas. Mezcla todo a velocidad baja o con movimientos envolventes hasta obtener una masa suave y sin grumos.
- Vierte esta mezcla en el molde engrasado y alisa la superficie con una espátula.
Preparación del flan:
- En otro recipiente, bate los huevos hasta integrarlos.
- Añade la leche condensada, la leche regular y la vainilla líquida. Bate todo hasta obtener una mezcla homogénea.
- Con cuidado, vierte esta mezcla sobre la capa de chocolate en el molde, ayudándote con un cucharón o una espátula para evitar que las capas se mezclen.
Horneado:
- Recubre el molde con papel de aluminio para evitar que se dore demasiado la superficie.
- Coloca el molde dentro de la bandeja con agua caliente en el horno. Hornea al baño maría durante 45 minutos con el molde tapado y luego destápalo para continuar horneando por 15 minutos más.
- Introduce un palo de brocheta para comprobar la cocción del flan. Si sale limpio, está listo.
Enfriado y desmolde:
- Retira el molde del horno y déjalo enfriar completamente a temperatura ambiente.
- Una vez frío, llévalo al frigorífico durante al menos 4 horas. Lo ideal es dejarlo reposar de un día para otro para que los sabores se intensifiquen.
- Para desmoldarlo, pasa un cuchillo fino por los bordes y coloca un plato grande sobre el molde antes de voltear. Hazlo con cuidado para que no se rompa.
El resultado es un chocoflan espectacular, con una capa de flan firme y sedosa sobre un brownie húmedo y con un intenso sabor a chocolate. Este postre no solo es un deleite para el gusto, sino también para la vista gracias al contraste visual de sus capas perfectamente invertidas. Se puede servir frío y acompañado de crema batida, frutas frescas o un poco más de caramelo líquido para un toque extra de dulzura. Este postre es ideal para celebraciones, cumpleaños o cualquier momento en el que quieras sorprender a tus invitados con un postre único e inolvidable. ¡Anímate a prepararlo y verás cómo se convierte en un nuevo favorito en tu repertorio de recetas!