Aunque no sigamos una dieta en sí, no está de más el saber qué alimentos para cenar no nos dejarán remordimientos de cabeza. Es un momento del día donde tenemos que cuidar la alimentación un poco más. Esto es debido a que ya no vamos a gastar el aporte calórico que podamos consumir.
De este modo, puede hacer que los kilos vayan subiendo, casi sin darnos cuenta. Del mismo modo, tampoco es saludable tomar cenas copiosas de cara a un descanso saludable. Así que, si todavía no lo tienes claro, nosotros te despejamos todas las dudas posibles sobre los alimentos para cenar más idóneos.
¿Qué debo incluir en la cena?
Aunque parezca complicado, no lo es tanto. Para la cena, lo mejor es decantarnos por la proteína y las verduras. Está claro que si has tenido un día bastante duro, lleno de entrenamientos y deporte en general, entonces también puedes añadir un poco de carbohidratos. Pero eso sí, nada de dulces ni alimentos salados.
Los minerales y las vitaminas necesarias ya estarán en las verduras, por lo que podremos conseguir una de las cenas más completas. Como resumen, nuestro plato tiene que contar con una gran porción de verduras cocidas o a la plancha. Otra parte de proteína en forma de huevo, pescado o carne blanca y grasas saludables como pueden ser el aguacate o bien, cucharada de aceite de oliva para acompañar.
¿Qué alimentos para cenar son saludables?
Después de hacer el balance de lo que necesitamos en nuestro plato, vamos a por los ejemplos más prácticos.
- Crema de verduras con huevo duro y yogur natural. La crema puedes hacerla de todas las verduras que más te gusten como espinacas o zanahorias así como puerros o espárragos. Ya cada uno tiene su propio gusto y tendremos que amoldarlo a él.
- Un trozo de salmón, con brócoli y 25 gramos de arroz integral. También puedes sustituir la parte del arroz por una rebanada de pan integral. De este modo, tendremos las proteínas del salmón, con la fibra y vitaminas del brócoli, que se combinan con el arroz o carbohidratos de efecto saciante.
- Filete de pollo, aguacate y lechuga o espinacas. Si el pescado es una buena opción para la noche, la carne no se queda atrás. Pero eso sí, intenta que sea de pollo o pavo. Además en este caso, contamos con las grasas saludables del aguacate que además nos aporta un sinfín de vitaminas y minerales. Desde luego, nuestro cuerpo está a buen recaudo gracias a él.
- Espinacas, huevo cocido y lentejas. De nuevo, la ración de lentejas tiene que ser mucho menor. Simplemente para poder añadir la sensación de saciedad que siempre necesitamos a estas horas de la noche. La proteína viene del huevo y como no, las vitaminas, ácido fólico y minerales, de las espinacas.
- Gambas, arroz y acelgas. Aunque el brócoli y las espinacas son siempre las dos grandes opciones para nuestros mejores platos, no está de más el ir variando. Ahora nos quedamos con las acelgas que también nos aportan muchos nutrientes.
- Ensalada verde con queso fresco. Cuando no tenemos mucha hambre pero necesitamos cenar, nada como hacerlo con un plato de lo más saludable. En este caso, se trata de un plato de ensalada. Ahí podrás añadir todas las variedades que quieras. Desde pimiento, hasta brócoli, acelgas, rúcula o lechuga. Unos trocitos de queso fresco serán el mejor acompañamiento para ella.
Aunque ahora que aprieta el calor nos decantemos por frutas frescas como la sandía o el melón no siempre son el mejor acompañamiento para una cena. En muchas ocasiones pueden ser las culpables de una digestión más lenta o pesada. Olvídate también de la naranja y mandarina para esta parte del día. Como no, lo mejor es dejar los cereales para la mañana y olvidarnos de la bollería antes de acostarnos.