En las ciudades los pisos que uno puede permitirse cada vez son mas pequeños, de ahí que sea necesario tirar de creatividad para aprovechar cada metro cuadrado. Decorar un salón pequeño puede representar todo un reto, pero hay trucos que pueden hacerlo parecer mas grandes.
No podemos aumentar de tamaño tu salón pero si darte algunos trucos no solo para optimizar el espacio disponible sino para hacer que visualmente parezca mayor. Es uno de los espacios mas importantes de la vivienda; nos reunimos, vemos la tela, comemos y realizamos otras mil actividades en el, así que merece la pena aplicarlos todos.
Apuesta por colores claros
Usar colores claros que reflejen la luz, hará parecer el salón mas grande. Cuanta mas luz mayor es la sensación de espacio, una sensación que siempre favorece la percepción que uno tiene de un determinado espacio. Unas paredes blancas son siempre un acierto y es que pocos colores tienen la capacidad de adaptación y la versatilidad de este color.
El color blanco además de aportar luminosidad al espacio contribuye a crear ambientes puros, limpios y frescos. Y no no tiene por que ser aburrido. Cuando hablamos de blancos hablamos tanto de blancos puros , que realzan la luminosidad y el estilo moderno de una vivienda, como de blancos rotos, que aportan una mayor calidez sin perder flexibilidad. Ambos pueden combinarse en un mismo espacio y combinarse con pinceladas de otros colores para lograr espacios de un gran carácter.
Pero no es el blanco la única alternativa para decorar un salón pequeño. Un gris claro o tonos pastel como el rosa o el verde en sus versiones más pálidas y aplicados en una sola pared, son grandes aliados.
Respeta los pasos y mantén el orden
Evita colocar muebles o accesorios que impidan moverse con comodidad por el espacio es muy importante en cualquier espacio. Probablemente esto te impida colocar en un salón pequeño todos los muebles que crees necesitar, pero forzar y abarrotar la estancia no hará sino reforzar la idea de que es pequeña.
Cuanto mas despejada y mas ordenada esté la estancia mayor parecerá. Por eso lo ideal es que los muebles respiren, que las entradas de luz se mantengan despejadas y que escojas piezas que puedan, moverse con facilidad para reconfigurar el espacio resulte sencillo, tal como os explicamos en el siguiente punto.
Elige muebles y accesorios ligeros
Una de las claves para decorar un salón pequeño es escoger piezas ligeras y que puedas mover con comodidad para reconfigurar el espacio según las necesidades del momento. Los muebles elevados, por ejemplo, logran transmitir esa sensación de ligereza y te proporcionarán espacio guardar debajo unos pufs que sirvan como asientos auxiliares cuando vengan invitados.
También aportan esa ligereza a los muebles los materiales de rejilla, los fabricados con fibras vegetales o las superficies de cristal. Debes tener presente, sin embargo, que no solo por usar piezas ligeras la estancia va a parecer mas grande. Si con el fin de no utilizar muebles voluminosos utilizas demasiadas piezas pequeñas, el espacio podría verse desordenado y por tanto, parecer mas pequeño.
Reduce la presencia del sofá
El salón es la pieza mas importante del salón y tendemos a colocar el mas grandes dentro del espacio disponible para ello. Sin embargo, en un espacio pequeño, es preferible reducir su presencia. Escoge un sofá elevado de aspecto liviano y combina este con una butaca mas ligera o pufs que lo complementen.
Otra opción para reducir la presencia del sofá es pintar las paredes del mismo color que la tapicería. O lo que es lo mismo, conseguir que el sofá quede camuflado en la pared. Así llamará menos la atención y no parecerá que ocupa lo que ocupa.
Incorpora paredes de cristal y espejos
Todo lo que contribuya a reflejar la luz en un espacio pequeño es bienvenido. Y es un hecho que tanto las paredes de cristal como los espejos gracias a esa capacidad, amplían visualmente un espacio. Una pared de cristal o medio tabique es la solución ideal para separar dos estancias pequeñas, ampliándolas, ero requiere una importante inversión. No así los espejos, que colocados de forma estratégica aportan profundidad a la estancia y lo llenan de luz.
Aprovecha la verticalidad
Cuando el espacio es limitado, utilizar la verticalidad se convierte en una necesidad. Y en un espacio pequeño aprovecharla es clave para crear espacio de almacenaje. Un armario no demasiado profundo pero de suelo a techo puede solucionarlos todos los problemas.
Probablemente abran mas el espacio unos estantes, pero si tenemos muchas cosas que no encuentran su sitio un armario cerrado es el mejor aliado. Y es que un espacio abierto, abarrotado y desordenado, no contribuye a nada positivo. Escoge un armario de líneas sencillas, que se camufle con la pared o incluso parezca una y soluciona los problemas de almacenaje.
¿Tienes ahora mas claro cómo decorar un salón pequeño?