Si tienes un hijo que tiene ansiedad escolar, los nervios a veces pueden ser normales, sobre todo cuando comienza la escuela. Es buena idea que suavices las cosas y que le consueles, pero tienes que escoger las palabras más adecuadas. Por eso, no te pierdas estas 5 frases que puedes decirle cada día.
Cuéntame tus preocupaciones, te escucho
Si sientes que tu hijo está estresado o preocupado, invítale a que te lo cuente. Los niños se sienten reconfortados cuando saben que tienen adultos en quienes confiar. Intenta escuchar de verdad. No te sientas presionado a lanzar soluciones o racionalizaciones. El simple hecho de prestar oído demuestra a los niños que nos preocupamos.
Parece que te sientes nervioso por…
Los padres naturalmente quieren resolver los problemas de sus hijos. Sin embargo, muchos de ellos omiten un pequeño detalle que marca una gran diferencia para los niños: la validación. Después de escuchar a tu hijo expresarse, repítetle las palabras. Parafrasea lo que has entendido y verifica las palabras.
¿Cómo puedo ayudar?
En lugar de saltar con una lista entusiasta de ideas, pregúntale a tu hijo qué necesita. Puede ser que algo pequeño como acompañarla el primer día o preparar un refrigerio especial marque la diferencia.
Hagamos una lista de todas las cosas que quieres que pasen
Anotar todos los aspectos positivos genera anticipación por las cosas buenas. No importa lo que le entusiasme a tu hijo, ya sea por aprender ciencias o simplemente por el almuerzo caliente favorito del martes. Centrarse en las cosas que le harán feliz aliviará sus preocupaciones.
¡Cada año escolar es una oportunidad para un nuevo comienzo!
Los fracasos del año escolar anterior, ya sean académicos o sociales, pueden poner un freno a las expectativas futuras de tu hijo. Sin embargo, a los niños les anima mucho la idea de una pizarra en blanco. Ayúdale a adoptar el concepto de empezar de nuevo.
Qué NO decirle a un niño ansioso
Si bien hay muchas formas de hacer que tu hijo preocupado tienes que estar preparado para el nuevo año, hay algunas frases que querrás evitar. El lenguaje desalentador puede exacerbar las preocupaciones de nuestros hijos y romper su confianza. Nunca minimice los miedos o la ansiedad de un niño. No digas:
- No hay nada que temer
- Estarás bien
- No es gran cosa
Ten en cuenta que ninguna de estas frases se burla explícitamente de tu hijo y, por lo general, todas son ciertas. Sin embargo, socavan las preocupaciones de un niño. Las preocupaciones de los niños son reales para ellos y validarlas es lo más útil que pueden hacer los padres. Si tu hijo sigue estando muy nervioso… esto es normal. Continúa ofreciendo tu apoyo de manera continúa.
En cambio, si te das cuenta que esos nervios van más allá y no le permite hacer una vida normal, entonces será necesario que descubras exactamente qué es lo que está ocurriendo para que tu hijo se sienta de esa manera. Quizá está viviendo situaciones conflictivas en la escuela que requieran de tu ayuda.