Todos conocemos la aspirina como uno de los medicamentos que nos ha aliviado de los dolores de cabeza, entre otras dolencias. Claro que quizás, no tengamos todavía gran conocimiento de que también puede hacer mucho por nuestra belleza. Los usos de la aspirina son más numerosos de los que nos podemos pensar a priori.
¿Sabías que puede ser una buena aliada para eliminar manchas y reparar la piel?. Pues son dos de los usos de la aspirina que podemos aprovechar y que nos saldrá mucho más económico que cualquier crema. La aspirina cuenta con un ingrediente de nombre beta-hidroxiácido y éste también está presente en numerosas fórmulas de las cremas que tenemos en el mercado. ¡Así que, es el momento de hacer la nuestra propia!.
Mascarilla exfoliante
Para poder eliminar todo eso que nos sobra en nuestro rostro, no hay nada como una mascarilla exfoliante. Retiraremos las toxinas así como evitaremos la aparición del acné, gracias a que la grasa del cutis se va a reducir considerablemente. Los poros también se cerrarán por lo que obtendremos una piel más sedosa y cuidada.
Para ello tan solo necesitamos cuatro aspirinas y otras cuatro cucharadas de agua templada. Necesitamos triturar las aspirinas así que, qué mejor que el agua templada para ello. Las dejaremos reposar unos minutos y con un mortero vamos a hacerlas puré y conseguir una pasta que aplicaremos sobre el rostro limpio. Lo vamos a dejar unos 15 minutos y aclaramos.
Mascarilla para una piel suave y regenerada
Para conseguir un efecto más suave en tu piel y como no, que se ve regenerada y perfecta, vamos a darte una nueva receta. Para ella, necesitas de nuevo cuatro aspirinas y además, dos cucharadas de leche. Puedes hacer algo similar al procedimiento anterior para que las aspirinas sean más sencillas de triturar. Calienta la leche hasta templarla y echar en ella las aspirinas. En cuestión de minutos estarán más blandas y podrás hacer con ellas un puré.
Cuando lo tengamos listo, es hora de ir aplicando sobre el rostro. En este caso, iremos haciendo un ligero masaje por las zonas más conflictivas. Esas zonas donde tienes acné o ciertos granitos. Una vez aplicada también es necesario dejarla actuar unos minutos más, así que con unos diez será más que suficiente para poder retirar. Puedes repetir esta acción una vez por semana, aunque si tienes la piel muy sensible es mejor dejar pasar más días.
Mascarilla contra las impurezas
Si combinamos el uso de la aspirina con el del limón, tendremos un gran remedio contra las impurezas de la piel. Necesitamos verla limpia en su profundidad y no siempre es sencillo conseguirlo. Por eso aquí te dejamos con una nueva receta que te ayudará en tu cometido.
Claro que cuando usamos el limón para la piel del rostro, no está de más mencionar que siempre es preferible que un tratamiento como éste se haga siempre por las noches, cuando ya no vamos a salir a la calle. Cuando aplicamos este ingrediente y nos da la luz del sol puede causar manchas y eso no es lo que queremos. De nuevo vamos a necesitar cuatro aspirinas y el zumo de un limón. Trituramos las aspirinas y mezclamos bien para poder conseguir una pasta que dejaremos sobre el rostro unos 15 minutos. Pasado el tiempo, retiramos con agua tibia.
Mascarilla hidratante contra las manchas
Le llega el turno a combatir las manchas y también las pequeñas marcas que los granos nos han dejado. Para ello, necesitamos de nuevo los usos de la aspirina. En este caso puede aumentar la cantidad, ya que si hasta ahora eran cuatro por cada mascarilla, aquí vamos a añadir seis. Las mezclarás con una cucharada de miel y dos de un yogur natural.
Una vez aplicada esta mascarilla, tendrás que dejarla actuar unos veinte minutos. Gracias a ella, tu rostro se verá más suave ya que la combinación de ingredientes hará que tu piel está perfectamente hidratada. Eso sí, no está de más que apliques tu crema de siempre una vez hayas retirado la mascarilla. Cuatro usos de la aspirina que conseguirán que nuestro rostro cuente con una luz diferente y siempre, perfecta.