Para higienizar el hogar se utilizan diferentes utensilios de limpieza, estropajos, paños, bayetas y escobas que sirven de gran ayuda. Pero todos esos útiles acumulan bacterias y residuos que si no se limpian, se van distribuyendo por las superficies del hogar. Lo que sin duda supone no solo un problema de higiene, sino que puede llegar a resultar un problema para la salud.
Es por ello que cada uno de esos utensilios necesita su propia limpieza con cierta regularidad. Solo así, te podrás asegurar de estar limpiando tu casa correctamente. Porque de nada sirve esforzarte por tener cada estancia limpia, ordenada y desinfectada, si utilizas materiales llenos de suciedad. Si quieres saber cómo puedes limpiar fácilmente los utensilios de limpieza de tu casa, toma nota de los siguientes consejos.
Cómo limpiar los utensilios de limpieza
Si eres fan de Friends, la icónica serie de televisión que aún hoy 20 años después de su estreno capta nuevos adeptos cada día, recodarás a la maniática de la limpieza por excelencia, Mónica. En uno de los últimos episodios, este personaje se encuentra limpiando con su aspirador y utiliza uno más pequeño para limpiar el grande. Su frase final es, ojalá hubiera uno más pequeño para limpiar este.
Aunque en su momento era una frase más graciosa de las muchas de la serie, lo cierto es que sin llegar a los extremos, es fundamental limpiar cada utensilio. Al utilizar tu aspirador debes vaciar el depósito, además de pasar un paño húmedo por sus piezas.
¿Te imaginas guardar una herramienta para limpiar el polvo, llena de polvo en el armario? Ilógico, verdad. Pues igual ocurre con todo lo demás. Con estos sencillos trucos de limpieza, podrás limpiar tus útiles de limpieza rápidamente, sin necesidad de reponerlos cada poco tiempo.
Cómo limpiar la escoba de barrer
Hazte con un peine de cerdas gruesas o un cepillo viejo, te servirá para retirar la suciedad acumulada entre las cerdas del cepillo de barrer. Después, prepara un recipiente grande con agua tibia y un chorreón de detergente. Sumerge la escoba y deja en remojo durante unos 20 minutos. Para terminar, aclara con agua y deja secar al aire libre y boca abajo, así no se deformarán las cerdas.
Para limpiar la fregona
Al menos una vez cada tres semanas se debe hacer una limpieza de la fregona. Tan solo tienes que llenar el cubo con agua tibia y un detergente quita grasas, como el lavavajillas. Deja en remojo durante media hora y escurre bien la fregona. Vuelve a poner en agua limpia, y remoja la fregona varias veces para eliminar la suciedad y el jabón.
Las esponjas y estropajos
Los estropajos acumulan restos de comida que pueden dar lugar a bacterias peligrosas para la salud. Límpialas muy bien después de fregar, ponlas en remojo con agua caliente, bicarbonato y vinagre blanco de limpieza. Quedarán limpias y desinfectadas.
Cómo limpiar las bayetas y los trapos
Prepara un barreño con agua tibia, una taza de bicarbonato, otra de vinagre blanco de limpieza y el zumo de un limón. Deja en remojo durante 30 minutos, pasado ese tiempo, frota bien cada bayeta, aclara con agua limpia y deja secar al aire libre. También podrías meterlas en la lavadora, aunque no es recomendable que mezcles los trapos de limpieza con la ropa, por lo que sería un gasto energético y económico innecesario.
Limpiar los útiles de limpieza, parte de la rutina de higiene
Si tomas por costumbre limpiar tus herramientas de limpieza después de cada uso, podrás mantenerlas limpias de una forma mucho más sencilla. Dejar acumular suciedad solo sirve para que esta se distribuya por toda la casa. Pero también para complicar la tarea de limpieza y desinfección posterior. Mantener la casa bien limpia y desinfectada te ayuda a sentirte más cómoda y confortable en tu hogar.
Añade unos minutos en tu rutina de limpieza para higienizar los utensilios que hayas utilizado. Tu casa quedará más limpia, evitarás gérmenes y otras bacterias peligrosas. Y así, conseguirás tener un hogar confortable y adecuado para tu descanso y tranquilidad.