La mayoría de las plantas florecen durante la primavera y el verano, siendo pocas las que lo hacen durante el otoño o el invierno. Estas flores de temporada colocadas de forma estratégica aquí y allí en nuestro jardín o terraza son una herramienta fantástica para disfrutar del color todo el año.
Podrás combinarlas con otras perennes de floración otoñal como aster, callistemon, polígala o verónica y arbustos con bayas rojas. Si lo haces así, lograrás un espacio exterior muy colorido en la temporada fría. Si estas dispuesta a trabajar en el jardín estas próximas desmanas, acércate a tu vivero de confianza, hazte con algunas de las cuatro flores de temporada para alegrar tu jardín en otoño y ¡búscales un sitio!
Alegría
La alegría o Impatiens walleriana es una planta muy fácil de cultivar. Una planta muy popular a la hora de decorar balcones y terrazas en otoño e invierno. Aunque es una variedad herbácea perenne, vive más de dos años, se utiliza principalmente como planta de temporada.
Las hay sencillas, dobles, mixtas… y se utilizan principalmente en arriates, borduras y macetas. Lo ideal es cultivarla en semisombra, evitando el sol directo del mediodía que marchitaría sus flores. Funcionan muy bien en balcones y terrazas orientadas al este o al norte pero, solo en aquellas ciudades en las que no estén expuestas a heladas. Requieren una tierra siempre húmeda, pero ¡cuidado con los encharcamientos!
Anémona japónica
La anémona japónica es una planta vivaz otoñal que puede alcanzar los casi dos metros de altura, lo que obliga a estaquillarla. Produce flores de forma constante durante todo el otoño. Después, durante el invierno las cápsulas que dejan las flores se abren y dejan caer las semillas que favorecen su reproducción.
Es una planta de sombra o semisombra que requiere una buena cantidad de materia orgánica y un suelo húmedo. Puedes encontrar diferentes variedades, siendo las mas comunes las anémonas de flor rosa y las de flor blanca, perfectas para iluminar el jardín en esta época del año.
Ciclamen
El ciclamen es una planta bulbosa que crece a la sombra de los árboles durante el invierno en los bosques mediterráneos. Agradece los inviernos frescos; el exceso de calor y el sol directo acaban con sus flores. Por eso al llegar los primeros calores en primavera (+16ºC), suelen marchitarse quedando latente en el suelo el bulbo hasta el otoño siguiente.
Existen distintas variedades de ciclamen, con tamaños grandes y pequeños y flores en una gran variedad de colores. Cada uno de ellos presenta diferentes características, siendo mas o menos tolerante a las heladas. En general, es una planta que aguanta las bajas temperaturas pero que, sin embargo, es preferible proteger de las heladas en un espacio cubierto como un porche.
El ciclamen necesita un lugar luminoso para desarrollarse correctamente, alejado de grandes corrientes de aire. Es muy fácil de cultivar. Basta con un riego moderado para evitar la podredumbre, preferiblemente con agua tibia y por inmersión.
Pensamiento
Una de nuestras favoritas. Esta planta anual es una de las mas floridas; no deja de florecer durante todo el invierno hasta que llegan los primeros calores. Gracia a la gran gama de colores que existe y a la intensidad de los mismos mantienen los espacios exteriores siempre alegres.
Los pensamientos deben plantarse en otoño en tierras sueltas con abundantes nutrientes y a la sombra. Mas allá de eso requiere muy pocos cuidados, basta con mantener la tierra siempre húmeda, pero prestando atención para que no se encharque.
Las cuatro flores de temporada que os proponemos hoy son plantas fáciles de mantener si gozan de temperaturas frescas, evitas el sol directo y mantienes su tierra húmeda. Plantas que catalogamos como agradecidas y que a cambio de unos pocos cuidados te permitirán disfrutar de una espectacular floración en esos meses en los que el jardín tiende a apagarse. ¿Sueles emplear alguna en tu jardín durante el otoño? ¿Cuál te gustaría incorporar este año?