El limón resulta muy refrescante en verano; de ahí que se utilice en innumerables postres fríos. La mousse de limón es probablemente uno de los mas populares. Resulta cremosa, refrescante y ligera; características que la convierten en una estupenda propuesta de postre durante el verano.
La mousse de limón es además sencilla de elaborar y puede conservarse en la nevera durante días. Ante una celebración con un importante número de invitados, podremos trabajar con antelación y despreocuparnos después, disfrutando de la fiesta como el resto. ¿Os gustan los sabores ácidos? Probad a combinar limón y lima cuando estas lleguen a los mercados.
Tiempo de elaboración: 45min + reposo
Dificultad: Fácil
Raciones:4
Ingredientes:
- 120 ml. de zumo de limón
- 60 g. de azúcar
- 2 hojas de gelatina neutra
- 300 ml. de nata (35% m.g)
- 2 claras de huevo
- Limón rallado para adornar
Paso a paso
- Hidrata las hojas de gelatina en agua neutra durante 5 minutos.
- Mientras, pon en un cazo el zumo de limón y el azúcar y llévalos a ebullición.
- Cuando la mezcla comience a hervir, incorpora las hojas de gelatina escurridas y mezcla bien. Retira del fuego y deja que se enfrie.
- Semimonta la nata en un bol, hasta lograr una consistencia tal que al pasar la varilla deje surcos.
- Monta las claras hasta que espumen; deben quedar ligeras no tienes que llegar a formar picos.
- ¿La gelatina está ya casi fría? Añade poco a poco la nata y las claras de forma intercalada, utilizando una espátula para incorporarlas.
- Reparte la mezcla en 4 vasitos y refrigéralos al menos 4 horas.
- Adorna con ralladura de limón, por ejemplo cada vasito antes de servir.